Sobre la posición española en la reforma de la UEM

Lluis Camprubí

Tradicionalmente, el planteamiento del gobierno español en lo referente a los cambios requeridos para la Eurozona era: alta exigencia y ambición propositiva en mancomunar riesgos; aumentar la capacidad fiscal; generar instrumentos anticrisis; y dotar la UEM/UE de una institucionalidad comunitaria que lo legitimara democráticamente. Lo que es un planteamiento lógico tanto en perspectiva europea para asegurar que la UEM adquiere la resiliencia necesaria a nuevas crisis y se impulsa la funcionalidad y convergencia del área, como en perspectiva estatal teniendo en cuenta su posición de economía periférica y deudora. Sigue leyendo