Los retos de 2021

David Rodríguez

Por primera vez en mucho tiempo, no voy a escribir un artículo monográfico sobre la pandemia. Por desgracia, el motivo no es que hayamos vencido al virus, que sigue bien enraizado en nuestras sociedades. La razón es doble: por un lado, en el mundo político y económico tenemos novedades y propuestas que vale la pena comentar; por el otro, mi anterior artículo, bajo el título ‘desescalando hacia la tercera ola’, ya incluye las predicciones de la mayoría de los expertos sobre lo que iba a pasar (y está ya pasando) como consecuencia del levantamiento de restricciones para salvar las felices fiestas navideñas. El 2021 bien podría llamarse ‘segundo año de la covid’, pero ya digo que voy a dejar de momento el asunto aquí.

El día 14 de febrero tenemos previstas las elecciones al Parlament de Catalunya, y digo previstas porque dudo mucho que puedan llegar a celebrarse antes de la primavera, aunque los partidos han engrasado sus maquinarias como si la tercera ola no existiera. La principal novedad de la última semana es la presentación de Salvador Illa como candidato del PSC, aprovechando su tirón mediático como ministro de Sanidad. Ya he dicho en más de una ocasión que su gestión durante la primera ola fue más que aceptable, empeorando notablemente después del 21 de junio, aunque aquí siempre se puede recurrir a culpabilizar de su inacción a las Comunidades Autónomas. Su principal rival, según las encuestas, será Pere Aragonés, cuya gestión de la pandemia está resultando más que lamentable, pero en ningún caso criticada por Illa, aunque en campaña electoral ya sabemos que puede pasar de todo. ERC es la eterna favorita para hacerse con la presidencia de la Generalitat, pero también la recurrente perdedora en el sprint final, en el que nunca puede descartarse la enésima operación de maquillaje del mundo de Junts per Catalunya. Sigue leyendo