Juanjo Cáceres
Marzo de 2020 quedó marcado por el inicio de la pandemia de la Covid19 en un país donde hasta entonces todo transcurría con normalidad y donde el sector editorial ganaba fuelle tras unos años algo más complicados. Ese mismo mes llegaba a las librerías “Aquí no hem vingut a estudiar” o “Aquí no hemos venido a estudiar”, un ensayo de Enric Juliana que él mismo describe como la “memoria de una discusión en la prisión más dura de la dictadura” (Burgos), pero donde lo que construye es una lección de historia contemporánea que va mucho más allá del terrible escenario penitenciario del Franquismo.
Dos personas ya fallecidas conforman los ejes sobre los que transita el relato. El primero y más importante, Manuel Moreno Mauricio, nacido en Vélez-Rubio pero emigrado a Badalona desde muy joven, ciudad a la que regresaría en 1964 tras una estancia de más de 17 años en prisión. Sería en Badalona donde conocería a otro vecino del municipio, Enric Juliana, con quien compartiría militancia en el PSUC durante unos diez años. El hoy periodista de la Vanguardia iniciaba su afiliación comunista alrededor de 1973 y una década más tarde, en 1983, asistía al funeral del luchador antifranquista. Fue precisamente entonces cuando, según él mismo da a entender, consideró finalizada su militancia. Sigue leyendo