Cordones sanitarios

Carlos Hidalgo

En el día en el que todos los candidatos a la presidencia de Francia que no han pasado a la segunda vuelta han pedido que no se vote a Le Pen (excepto Zemmour, que pretendía adelantarla por la ultraderecha), en ese mismo día, Mañueco, que pretendía gobernar sin ciudadanos, va a gobernar con Vox.

En Francia, donde todavía hay quien se arrepiente del régimen de Vichy y el colaboracionismo nazi, se mantiene el cordón sanitario a una ultraderecha que está más cerca que nunca de hacerse con el poder. En España la derecha demócrata, que no reniega del todo del franquismo, cree que puede domar a la ultraderecha y, eventualmente, absorberla dentro de los límites de la constitución del 78. Sigue leyendo