LBNL
Un año más en nuestras vidas y un año más de Debate Callejero, y ya van la tira (desde 2006… para quién no lo sepa). ¡Y menudo añito! Esperemos que el próximo sea un poquito más relajado, aunque no parece… Porque a decir de los últimos acontecimientos políticos, la crispación no solo no parece aflojar, sino que amenaza con tornarse en crisis institucional seria… Esperemos que el agua no llegue al río y que en pocas semanas – previa subsanación de la inconstitucionalidad procedimental alegada por el Tribunal Constitucional – tengamos renovados no solo a los dos magistrados del TC que nombra el Congreso sino también a los dos que debería nombrar el Consejo General del Poder Judicial. Y ya de paso, nombrados también a los nuevos vocales del CGPJ, que también llevan varios años de prórroga a cuenta de la cerrazón del PP para pactar su nombramiento con la excusa de que Pedro Sánchez quiere apoderarse de las instituciones o de que hay comunistas en el Gobierno o vaya usted a saber. Manda narices…
Y si no, pues seguiremos funcionando a media velocidad, al menos en lo que se refiere al poder Judicial, pero lo que más importa es que el Gobierno siga gestionando los muchos frentes abiertos y especialmente el económico. Porque la guerra en Ucrania no va a remitir y las tensiones económicas – primordialmente energéticas, pero no solo – tampoco. España ha liderado y, aunque timoratamente y desde luego tardíamente, la UE ha adoptado varias medidas que limitarán la factura energética si vuelve a desbocarse. Y mientras tanto, seguirán llegando los 70 mil millones de subvenciones a fondo perdido a cuenta de la crisis del COVID y, noticia reciente, más de 80 mil adicionales en créditos “blandos”, que el Gobierno no contaba con pedir pero que, tras la subida de los tipos de interés, resultan más atractivos que acudir a los mercados. Sigue leyendo