Tranvías y pistas de tenis

Julio Embid

Voy a abrir con una sentencia que igual el Julio Embid de 2040 no me perdona: “No me gusta el tenis”. Me parece aburridísimo. Nunca he podido ver un partido completo. Me quedo dormido al segundo saque. No entiendo que primero se cuente 15, luego 30 y luego 40 en lugar de 45. Sé quién es Rafa Nadal o Roger Federer, pero nunca he visto un partido completo excepto en la Game Boy o en la Wii. Me alegro de que gane Rafa Nadal, igual que si gana la selección española de balonmano a la selección francesa de balonmano, pero tampoco deseo que pierda ni mucho menos. Esta opinión, personal e intransferible, igual choca con la de otros de nuestros lectores que probablemente no les guste ver vídeos de Youtube de cocina, ver First Dates después de cenar o jugar a Battlemech una vez por semana. Tres actividades que debo confesar que, a mí, me gustan bastante pero por las que no tengo ninguna intención de hacer apología.

A nadie intento convencer de mis filias y de mis fobias personales y como liberal (en el buen sentido, no en no pagar Impuesto de Sucesiones por los locales de tu tía la soltera a la que veías una vez al año) entiendo que cada uno es libre de pasar su tiempo libre como quiera siempre y cuando no moleste a los demás. Fácil y sencillo. Sigue leyendo