Marc Alloza
El final del 2021 estuvo marcado por la rotura de stock de test antígenos previo a las fiestas. El exceso de demanda ante una oferta limitada se tradujo en una caza y captura de tests y un incremento de precios. El 2022 entró surfeando en una sexta ola y por consiguiente, sostuvo la demanda de estas pruebas. El comienzo de las clases en los colegios ha rematado la jugada retroalimentándola hasta el límite que el gobierno decidió intervenir para regular el precio.
No queda claro quien se ha lucrado más en este asunto; distribuidoras, intermediarios y farmacias niegan que hayan sido ellos, pero “entre todos la mataron y ella sola se murió”. Los precios en otros países oscilan entre la gratuidad en Reino Unido a los 7-20€ de Suiza, pasando por los 2,1€ de Portugal y los 2,7€ de Grecia etc… Sigue leyendo