Caos pre-navideño

LBNL

Me debo estar haciendo mayor porque la realidad empieza a superarme. Los chalecos amarillos siguen revolucionando Francia a tortas sin que nadie sepa muy bien qué quieren al no tener líder ni programa. Los británicos tampoco saben lo que quieren. Ni lo que va a pasar. El Parlamento, en principio, votará contra el acuerdo del Brexit el miércoles. Pero unos para separarse menos de la Unión, y otros para separarse más. Es decir, división total sobre algo trascendental para la nación. No está tampoco claro que pasará en Andalucía donde PP y Ciudadanos – segundo y tercero en las elecciones – tendrán que superar varios obstáculos – incluidas las exigencias imposibles de Vox – antes de poder destronar al PSOE de Andalucía, sin que sea descartable que Susana, que ganó las elecciones, siga en funciones hasta repetir las elecciones junto a las locales, autonómicas y europeas a finales de mayo. Similar incertidumbre sobre la gobernabilidad nacional. En puridad, con solo 84 diputados y sin posibilidades reales de aprobar los presupuestos sin hacer concesiones imposibles a los independentistas, Pedro Sánchez debería convocar elecciones. Pero no hay mayoría en la práctica para derrocarle y seguramente agote la legislatura, entre otras cosas porque, cuando finalmente se convoquen, es muy posible que consiga seguir gobernando pese al estruendo de la Brunete carco-mediática. Por no hablar de los indepes, que parecen finalmente animarse a la insurrección callejera hasta que la represión de Madrid sea insostenible. Si lo dicen en serio, claramente no aprenden. Como tampoco aprende Trump, que mientras anuncia el despido de su jefe de gabinete – el único que ponía algo de orden en la Casa Blanca – insulta públicamente a su ex Secretario de Estado y apoya la prisión para su abogado por sus graves crímenes ¡pese a haberlos cometido para defender sus intereses! Y mientras tanto, Canada detiene a la vicepresidenta de Huawei por orden de Estados Unidos elevando la tensión con China a un nivel peligroso, hasta entonces meramente comercial. Y caen gobiernos en Europa a cuenta del pacto global por la emigración de la ONU. Por dios, que llegue Papa Noel rápido.

Vayamos por partes. Para mí es evidente que lo de los chalecos amarillos es una mezcla de la proverbial tendencia francesa a la revuelta, la falta de representación institucional de Le Pen y el cabreo generalizado con el régimen post Gran Recesión que ha dejado a tantos millones de personas tirados. Puede que acabe como el rosario de la aurora y se alumbre una sexta república. Pero lo probable es que dentro de algunas semanas, con la subida de los carburantes ya anulada, todo parezca un fiebrón lejano. Lo que no obsta para que debiera ser tenido en cuenta como aviso serio por el Presidente Macron y por Bruselas, en parte también afectada por la sublevación. De momento, Macron se dirigirá a la nación hoy a las 20 horas en lo que se anticipa será un mensaje de firmeza aderezada de medidas sociales.

Lo del Brexit merece artículo aparte. La magnitud de la confusión se confirma con la amenaza ayer de May a los rebeldes tories de que tumbar el acuerdo podría hacer que el Reino Unido se quedara en la Unión, saliera de la Unión sin acuerdo o hubiera nuevas elecciones… En fin. Los laboristas quieren menos separación y por tanto votarán en contra. Pero menos separación – la vía noruega – implica seguir dentro a todos los efectos pero sin voto. Para eso mejor seguir dentro del todo. Los brexiteros duros quieren más independencia de Bruselas. Pero eso implica un Brexit sin acuerdo – desastroso para todos pero sobre todo para Reino Unido – o concesiones adicionales de Bruselas, que no tendrán lugar más allá de algún detallito irrisorio para vestir la mona. Y que Bruselas se cobrará con contra-concesiones invisibles pero mucho más importantes. Si pierde la votación, como es previsible, Theresa May debería dimitir pero los brexiteros no van a coadyuvar para echarla. Y los laboristas no pueden convocar un referéndum para la permanencia, lo cual seguramente agradecen en su fuero interno dada su división interna al respecto. Total, que probablemente se llegue a un acuerdo muy parecido al actual pero solo cuando estemos al filo del desastre en marzo del año que viene. Pero cuando se juega con fuego…

Lo de Andalucía debería ser sencillo. Pero no puede no serlo en absoluto. Para empezar está el procedimiento: constitución de la mesa del Parlamento y elección del Presidente. El reparto del pastel entre PP y Ciudadanos tendrá necesariamente que incluir quién va a ser Presidente autonómico. Y qué concesiones se le harán a Vox, que ya exige la devolución imposible de competencias a la administración central. ¿Va Vox a empezar a moderarse apoyándoles a cambio de nada? ¿Aceptará Ciudadanos meterse en la cama con los amigos de Le Pen, Salvini y Bannon?

Lo de Madrid es más sencillo porque Pedro Sánchez tiene todas las cartas en su mano: no le pueden echar. Pero tampoco puede acometer nada de calado. Tampoco tiene necesidad. Le basta con seguir el manual Rajoy: que los demás metan la pata y te allanen el camino. Torra y sus secuaces serán muy probablemente de ayuda, elevando la tensión con purgas en los Mossos y vías eslovenas. En cuanto pasen de las palabras a los hechos, 155 al canto y a tomar vientos las acusaciones de vende patrias. Es más, dada la reincidencia, esta vez más en serio, sin convocar elecciones y poniendo a gente sensata del PSC al mando hasta nueva orden. La única duda es si antes o después de la sentencia del Procés. Es posible que hasta entonces los indepes sigan en modo meramente declarativo. Pero no podrán contenerse tras la condena y Sánchez podrá ungirse como garante de la unidad nacional antes de las elecciones de mayo. En paralelo, se sube el salario mínimo, se saca a Franco del valle y fuera. Como poco, el PSOE salva los muebles. Y a partir de entonces, quién lo tendrá peor será el PP de Casado, desangrado hacia Ciudadanos y Vox. Con un poco de suerte se escinde y clarificamos el panorama político: dos partidos de centro izquierda y derecha y dos extremos radicales. La coalición de los dos centristas sería un resultado obvio, especialmente cuando Vox haya tenido ocasión de mostrar sus peores pulsiones xenófobas, homófobas, machistas y ultra-catoliconas.

No me pidan que vaticine que pasará con Trump. Si fuera capaz de hacerlo con tino no estaría escribiendo este artículo sino forrándome en un programa de videntes pero en prime time. Su zafiedad es peor que la de Jesús Gil y Berlusconi juntos pero sigue siendo el Presidente de los Estados Unidos. Llevamos ya dos años y seguimos vivos. En realidad tenemos mucho de qué alegrarnos. Pero en cualquier momento la cosa se desmanda y tenemos que afrontar consecuencias impredecibles. Hasta ahora, la guerra con China ha sido meramente comercial. Los chinos saben que son importantes para Estados Unidos pero que Estados Unidos es todavía más importante para ellos. Ahora bien, una cosa es la imposición de tarifas comerciales y otra la detener a la heredera de Hwawei a cuenta, al parecer, de no respetar las sanciones a Irán. Sanciones unilaterales, extra-territoriales y en violación del acuerdo internacional para parar el programa nuclear iraní, que la UE, Rusia y China apoyan como apoyó Estados Unidos hasta que Trump decidió, también en este tema, remar contra lo conseguido por Obama. ¿Puede quedar en nada? Si, pero también puede ser el principio de una confrontación mucho más grave.

Como también puede serlo la tensión creciente en el mar de Azov que, para los no iniciados, es el gran lago adyacente a la la península de Crimea, unilateralmente anexionada por Rusia hace un par largo de años. No es descartable que el Presidente ucraniano Poroshenko, de capa caída en las encuestas para las elecciones presidenciales de finales de marzo del año que viene, haya buscado la confrontación. Pero no es menos cierto que Putin sigue poniendo en práctica con mano de hierro su expansión en la zona, pese a quien le pese y, dios no lo quiera, caiga quien caiga.

Finalmente el pacto global para la emigración que casi ha provocado crisis de gobierno en Estonia, Letonia, Eslovaquia y Países Bajos y ha tumbado la coalición gubernamental en Bélgica. Hungría y Austria ya se habían desmarcado. Lo peor es que el texto internacional que va a ser refrendado en la Cumbre de Marrakesh, es un instrumento internacional para concienciar a los países de origen y de tránsito de la inmigración de los peligros que supone para ellos, al objeto de que incentivar su mayor colaboración contra la inmigración irregular. Pero da igual. Trump se retiró y sus huestes han conseguido insuflar la noción de que el pacto, no vinculante, supone una rendición total ante la inmigración descontrolada. Que sea todo lo contrario es indiferente.

Para acabar de rematar, no me explico lo de la final histórica de la Libertadores jugada ayer en Madrid, que pese a organizarla en solo una semana, fue ejemplar. ¡Sin ningún incidente! ¿Por qué no pudieron jugarla allí si las dos hinchadas son tan ejemplarmente cívicas? ¿Por qué Argentina no pone coto a los mafiosos que ponen en riesgo la vida de todos los que van al futbol allá y mancillan gravemente la imagen de Argentina? No es tan difícil de entender en el fondo: España es un país muy desarrollado en todos los sentidos y sobre todo en el plano institucional. Claro que entonces no me explico que andemos todos a tortas en España y de cabeza lamentando nuestro sino. ¡Santa Claus, anticipa tu llegada a ver si el espíritu navideño ayuda a serenar la cosa un poco!

4 comentarios en “Caos pre-navideño

  1. Segunda parte del P’alante Pedro, con ese mágico “ se ” hace esto y lo otro y a tomar vientos. ¿ Problemas en Cataluña ? 155 al canto y “ se ” pone a socialistas sensatos ( y a tomar vientos , imagino ). ¿ Huawei ? Se libera a la heredera y a seguir tomando vientos. ¡ Vaya bien lo vamos a pasar ! ¿ Chalecos amaríllos ? Ya se sabe , un rasgo del carácter francés. ¿ Tensión en el mar de Azov ? ” Se deseca ” y asì pueden tomar el aire los paises ribereños, algo que siempre ayuda. ¿ La final de la Libertadores ? Un toque de distinción de Carmena , quien al igual que las hinchadas no ha reparado en gastos.
    Al fin y al cabo Sánchez no tiene presupuestos, a pesar de tener todas las cartas en la mano ; Susana y la izquierda ha perdido el gobierno y el parlamento en Andalucía y el fascista de Torras sigue erre que erre animando la insurrección. Lo dicho : ¡ P’alante Pedro !

  2. Los socialistas ni siquiera podrían aplicar el 155 sin el PP . No es una situación deseable pero el cojonismo lo es menos. Los refritos después de un puente largo hacen estragos. En el fondo subyace una admiración por el decisionismo frente a las complicaciones de los disensos inherentes a la complejidad urbana, cosmopolita y global. Algo muy querido tanto por las elites como por una masa que se reconoce en valores de urgencia. En el fondo un abandono institucional.
    El PSOE tiene una crisis enorme , y con él los españoles en quien han confiado , que son muchos y desorientados.
    Que sea Lastra -una adolescente intelectual- quien defina los desafíos , permite a LBNL presentarse como un analista del “ se “ , impersonal .
    Lo ocurrido ayer en Cataluña es el punto de no retorno. Y el Sánchez inútil y prescindible debe considerar -como LBNL – que no se trata de un juego de salón amarrado por situaciones no previstas por las reglas del juego sino de algo sumamente peligroso que incidirá de forma negativa en nuestras vidas.

  3. Reconozcamos que nos han tocado unos tiempos excelentes para los que encontramos interesante la política , la economía y esas cosas, aunque a veces alguna llamarada nos chamusque las cejas. «La realidad me supera», pues si ¿eh?, por eso la humildad, aparte de moral, es practica . Me pasa lo mismo.

    Concuerdo bastante con el conjunto de lo dicho con LBNL. Solo tengo una ligera matización con Macron, . Como todo esto sea porque «Macron me toca las narices» habrá al menos que reconocerla a Macron el valor de haberlas tocado como poca gente antes lo consiguió. Yo confieso que tengo un problema para analizar con justicia al personaje porque le tengo bastante manía.

    Diria que no soy el único con manía a personajes que escribe por aqui, y recalco una vez mas que las fobias y la lucidez maridan extraordnariamente mal.

    Respecto a Macron, reproduciendo únicamente comentarios que no son mios, por lo visto le ha perdido bastante su soberbia y lenguage extemporaneo en algunas situaciones donde los franceses esperan otra cosa de un presidente de la República. Tambien mencionar que las «medidas sociales» anunciadas parece que, en gran parte ya estaban adoptadas y se iban a poner en marcha este año, solo que más paulatinamente. Regu. No tengo ni idea de quienes son los chalecos amarillos, ni quiero dedicarle mucho tiempo.

    En todo lo demás me parece que LBNL está muy bien hoy, particularmente inspirado en el tema de la politica nacional y los equilibrios.

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