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La decisión de la CUP de volver a votar en contra de la investidura de Mas obligará a repetir las elecciones autonómicas catalanas en marzo a excepción de una no descartable indisciplina de última hora de un par de diputados más independentistas que anticapitalistas – un tamallazo catalán – o de la muy improbable renuncia de Mas – pese a haberse llenado la boca declarando en el pasado que él no sería nunca un obstáculo para la independencia – a favor de otro candidato soberanista. Igualmente improbable es que Rajoy o Sánchez puedan conseguir los apoyos suficientes para ser investidos y evitar así la repetición de las elecciones generales en mayo o junio. Desde fuera de España será difícil de entender que nuestros partidos políticos no acaten el mandato de las urnas y negocien lo indecible hasta conformar mayorías de gobierno más o menos estables. Basta recordar los más de doce meses que se pasó Bélgica sin gobierno o las coaliciones varias que gobiernan en muchos de nuestros socios europeos.
En Cataluña lo lógico habría sido aceptar que el plebiscito se quedó corto, volver al redil de la legalidad constitucional dejándolo para una futura ocasión y formar un gobierno socio-vergente, con Esquerra o sin ella porque cabría contar con el apoyo pasivo de Ciudadanos bajo una hipótesis semejante. Pero esta opción habría supuesto el fin de Mas y hasta de Convergencia, cada vez más superada por Esquerra (el 20D CiU bajó de 16 a 8 diputados mientras ERC triplicó de 3 a 9).
En Madrid la opción más sencilla sería obviamente una gran coalición PP-PSOE con o sin Ciudadanos y en su defecto una coalición del PSOE con Podemos apoyada por Esquerra, PNV e IU, más complicada por el mayor número de socios pero más coherente con la mayoría electoral global de izquierdas. Ninguna de las dos opciones parece factible.
El PSOE no puede convertirse en cómplice de la continuación del PP en el Gobierno y mucho menos con el amigo de Bárcenas al frente. Podría pero el castigo del electorado socialista sería tremendo: al SPD le resulta más sencillo apoyar a una Merkel que no cobra sobresueldos ni se lo consiente a sus correligionarios, no legisla contra el aborto y es la campeona de la defensa de los refugiados sirios. Ojalá Susana Díaz lo tenga claro y las reseñas de prensa de ayer en sentido contrario resulten infundadas.
Tampoco puede el PSOE pactar con Podemos y Esquerra una agenda soberanista inconstitucional y un referéndum de autodeterminación en Cataluña lo es. Otra cosa sería pactar la formación de un comité gubernamental que estudiará el posible encaje del “derecho a decidir” en una futura reforma de la Constitución, dándose un plazo de un año o dos para someter sus recomendaciones al Gobierno, por ejemplo. Pero no parece viable que Esquerra o En Comú vaya a aceptar semejante componenda y menos ahora que la ciudadanía catalana tendrá previsiblemente que volver a pasar por las urnas.
Ni locos aceptaría Esquerra rebajar su órgano cuando tiene la perspectiva de sumar un buen puñado de votos de la CUP para acabar de darle la puntilla a Convergencia. También sería mortal aceptar para Podemos – En Comú, que también mejorará su resultado catalán a poco que la alcaldesa Colau y su gente se impliquen en la campaña como en las generales.
No tiene tampoco demasiados incentivos para pactar el PP que confía en recuperar parte del electorado perdido a favor de la abstención y sobre todo de los que optaron por apoyar a Ciudadanos, que ha perdido su aureola de posible alternativa y encima le está haciendo en gran medida el juego al PP; hasta en Cataluña podría mejorar Albiol en detrimento de Arrimadas y los suyos. Ahora bien, el PP también tendría ganancia si Mas logrará finalmente ser investido o si lo consiguiera otro President soberanista dado que la polarización política resultante redoblaría la presión sobre el PSOE para permitir la investidura de Rajoy; win-win para Rajoy, bien investido, bien desgastando al PSOE de cara a la repetición de las elecciones. En todo caso, el parón del proceso le permite al PP seguir mostrando firmeza serena sin tener que tomar decisión drástica alguna.
¿Qué puede hacer el PSOE en esta doble tesitura? En Cataluña haría bien en mantener el discurso federalista pragmático subrayando el talante constructivo de su líder que bien podría mejorar los resultados de las autonómicas en vista del mal comportamiento político de los demás. A escala nacional sería esencial evitar a toda costa una operación de relevo de Sánchez controlada por Susana y los barones. Le pusieron ellos de Secretario General, resistiéndose todo lo que pudieron al llamamiento de Madina para que votarán todos los militantes y movilizando a sus aparatos para contrarrestarlo cuando fue inevitable aceptar el clamor. Sánchez y su equipo han demostrado estar a la pobre altura que muchos les suponíamos pero para que su reemplazo sirva para mejorar las expectativas de Gobierno, debería no sólo cumplir formalmente con los Estatutos internos sino salir de unas elecciones primarias verdaderamente abiertas a la militancia y a los simpatizantes que sirvieran al tiempo como banderín de enganche para las elecciones de mayo.
En paralelo, cabría imaginar alguna propuesta innovadora para tomar la iniciativa frente a Podemos respecto a la plurinacionalidad de España. Por ejemplo, a su exigencia de referéndum catalán cabria responder proponiendo un referéndum a escala nacional sobre la conveniencia o no de un Estado federal, con dos o tres opciones: mantener el status quo, transformar el Estado autonómico en federal e incluso sometiendo a consideración popular un posible federalismo asimétrico para las autonomías históricas (las del artículo 151 de la Constitución).
Una propuesta semejante tendría pocos visos de salir adelante pero pondría a Podemos a la defensiva y también al PP, que no podría alegar la legalidad vigente para oponerse y quedaría retratado en su inmovilismo centralista, como seguramente también Ciudadanos.
Una propuesta de referendo nacional sobre la estructura del Estado no estaría exenta de riesgos pero sería perfectamente legal y obligaría a todos los demás partidos a posicionarse sobre la iniciativa socialista, lo que probablemente – si se explicará y defendiera apropiadamente – ayudaría a mejorar las opciones electorales socialistas tanto en Cataluña como en el resto de España.
Si por el contrario optan por cargarse a Sánchez, investir a Susana como única candidata ante la imposibilidad de conseguir miles de avales en corto plazo, negarle el pan y la sal a Rajoy y al PP porque son unos fachas y al tiempo llenarse la boca sobre la unidad de España, tanto el PSC con o el PSOE cosecharán nuevos récords negativos para mayor gloria de Esquerra y el PP. Y a partir de ahí que dios nos coja confesados.
Ah, muy feliz año a tod@s!
¿mayoría electoral global de Izquierdas? ¿cuala? a ver si ahora va a ser verdad que ciudadanos es de centro-izquierda…..
El único bloqueo realmente importante es el bloqueo mental de los socialistas (y de no pocos de sus consejeros externos, analistas y politólogos de cabecera). La última manifestación del bloqueo/vacío mental la ha verbalizado Rafael simancas, insistiendo en el fantasma de esa mayoría de izquierdas y de cambio y no sé cuantas cosas más con la que ellos deliran.
Confiábamos algunos (pocos) en que en el seno del PSOE no se impusiera el impulso suicida, que se podía presagiar ya con su estrategia para la legislatura, desde su comienzos, y se hacía evidente con la demencial decisión política de ganar poder municipal y autonómico a costa de engordar a la bestia y cavar su propia tumba. Pero la tentación suicida se impuso y cuando la realidad se muestra tal como es, los responsables solo saben apostar por la huida hacia delante (o por cavar más en el suelo, según se mire). Ahora ya todas las opciones son malas y la única sensata –la que implica una desautorización retrospectiva de las principales decisiones tomadas en los últimos años- tiene un coste que nadie en la actual dirección socialista está dispuesto a asumir. He dicho nadie y he dicho bien: ni uno sólo de las decenas de miembros del comité federal del PSOE –el núcleo dirigente fundamental, aún hoy, de la esperpéntica izquierda española- fue capaz de decir “no” a la resolución política pactada en su última reunión, que es un monumento a la indigencia intelectual y política
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“PSOE, de aquellos pactos, esta crisis”, Jose A. Zarzalejos, en El confidencial (2.1.16):
“(…) El grave problema de los socialistas españoles es de coherencia y de autoanálisis. El PSOE lleva años -muchos- jugando al oportunismo político con la coartada de que su obligación programática es “echar al PP” por encima de cualquier otra consideración. Es una falacia. Antes que deshacerse del adversario hay que fortalecerse en el espectro ideológico en el que se desenvuelve el partido, o sea, la izquierda (…) En estas circunstancias, la crisis que padece el PSOE es de las que se ha ganado a pulso y concierne a unos y a otros y apenas sí salva a la gran electora del socialismo, la presidenta de la Junta de Andalucía, que es la única dirigente que pareció intuir que los pactos locales y autonómicos con Podemos eran el abrazo del oso. Mortal de necesidad. Deberían pensar ahora los integrantes del Comité Federal del PSOE si -con o sin Rajoy- no les traerá más cuenta una abstención en la investidura de un presidente popular por un tiempo suficiente para que cese “el lamentable espectáculo” (sic, de Patxi López) que están dando y puedan recomponerse de su alocada estrategia”.
http://paralalibertad.org/psoe-de-aquellos-pactos-esta-crisis/
Proliferan los análisis sobre lo que le conviene tácticamente a cada fuerza política, pero escasea la reflexión sobre lo que le conviene al país.
Mi punto de partida es que no es bueno para España que siga gobernando el PP por algunos motivos: primero, por ser una organización profundamente corrompida; segundo, porque ha contribuido de manera decisiva a alimentar el secesionismo (boicot a productos catalanes, «Pujol, enano, habla castellano», recurso contra el estatuto de 2006, anticatalanismo primario como medio para procurar votos en el resto de España), y con esas credenciales es difícil que alumbre una solución al problema; tercero, porque su gestión de la crisis me ha parecido muy mala, siendo ejemplo de ello que la legislatura acabó con menos empleados que los que había en noviembre de 2011.
Lo que yo creo mejor para el país es un gobierno de izquierdas que refleje la mayoría de izquierdas del electorado (sí, Sr. Franco; un millón de votos más). Lógicamente, el PSOE debería ser el núcleo de ese gobierno. En todo caso y como señala el articulista, sería complicado formarlo. Yo lo veo en teoría posible en torno a una agenda marcadamente social, de reforma institucional-constitucional y de apertura federalizante, en un camino en el que cabría explorar la opción que hoy se sugiere u otras, manejando de manera constructiva la ambigüedad.
Pero la dificultad insoslayable que, yo creo, nos aboca a elecciones es que quienes podrían formar ese gobierno en realidad no lo quieren: el aparato del PSOE, porque desea eliminar a Sánchez (me asombra que alguien de verdad crea que, por ejemplo, Susana Díaz podría ser una oferta electoral atractiva); y Podemos porque aspira al sorpasso en unas nuevas elecciones, y parece que ansía asaltar los cielos a cualquier costa como principal prioridad.
En definitiva, se impone el tacticismo. Así que no quedará más remedio que votar otra vez, lo que ojalá hagamos con la gobernación del país en la cabeza.
Perdonen que les insista:
Ante este pandemonium electoral que asola España solo hay una solucion ;
Que gobierne Peter Sanchez en minoria con el apoyo legislativo de todos los demas en areas concretas y con verdadero dialogo politico para aportar soluciones.
Hay quien duda de que Peter Sanchez sea el socialista que pueda conseguir algo que en España es impensable ,la neutralidad politica….pero…es que esa es la estrategia politica del secretario general del PSOE,por si nadie se habia enterado.
El proceso independentista se desmorona como un castillo de naipes,La CUP ha quitado la carta de Arthur More & More y si «Junts pel si» no presentan una carta alternativa «el proces» se verá obligado a realizar nuevas elecciones y eso supondra que los partidos que daban forma a =Junts pel Si» iran por libre y se mediran las caras con otros partidos intentando sacar el mayor partido posible.
ERC se reforzara con el voto desencantado de los votantes de CUP.
Podemos-Colau intentara camelarse a los votantes desencantados de la CUP y los que castigaron al PSC votando a Cs.
CUP pasará a la historia de las estadisticas
C’s querrá mantener el tipo con los votantes que podrian irse a la abstencion.
PSC intentara por todos los medios que haya un gobierno socialista en España antes de unas nuevas elecciones catalanas.
el PP aumentara su voto con…..¿Albiol?…¿por que no?…ejem….jiji.
En fin.sea lo que sea lo que suceda en el panorama politico,vamos que tener que de vez en cuando reconocer que ninguno de nosotros tiene razones para estar tranquilos.
Asi que viviremos en un mar revuelto donde los nervios son las olas y yo me sentire como pez en el agua,,,,
Mensaje para los duros de mollera:
¡¡¡Salvemos al soldado Sanchez!!!
¡Ad astra per aspera!…JAJAJA….que nervios.
Si en la misma noche electoral el PSOE hubiera a) reconocido su enorme derrota b) reiterado que nunca daría su voto a un presidente indecente ( aunque podría estudiar la abstención con un presidente decente al frente del PP y una hoja de ruta de reformas pactadas a dos años c) no pactaría con Podemos por su indefinición ideológica y compromisos con fuerzas independentistas d) anunciado un congreso donde los miltantes – esa estupidez de primarias abiertas se deja para quienes se la crean- eligieran un nuevo SG; si el PSOE, ya digo, hubiera hecho alguna de estas cosas, o todas, su posición sería hoy mucho más tranquila. No las ha ha hecho y a ello se ha sumado la enorme torpeza de una Susana Díaz que ha demostrado estar más pendiente del debate interno que de la nación. Mejor haría en dedicar su tiempo a Andalucía, Uno cree que el problema del PSOE no se soluciona cambiando Secretarios generales pero eso que lo decidan sus militantes. Mucho de quienes le hemos votado, sin militar, no aceptamos un pacto ( activo o pasivo) con el PP mientras el indecente esté al frente ni tampoco con el clan de Somosaguas, de quienes esta semana en Euskadi me contaban sus compañeros de partido auténticas maravillas de la calidad democrática de los personajes. El PSOE a la oposición, que es donde le ha situado el electorado, y a esperar mejores tiempos. O no. También hay que saber morir con dignidad.
Polonio comparto tu analisis ,aunque soy consciente de que se te olvida una premisa importante.
Peter Sanchez luchara, por todos los medios habidos y por haber ,en conseguir un gobierno socialista para que no hayan nuevas elecciones.
Es lo unico sensato que puede hacer,hablar en el Congreso de los diputados y poner sus cartas en la mesa.
Quienes no quieran compartir sus cartas que se preparen para unas nuevas elecciones.
¡¡Rajopiyus no gobernara!!
¡¡Peter Sanchez ,debe gobernar!!
¡¡¡O él o el Kaos!!…..ejem.
Hay algo que me deja perplejo: todo el mundo acuerda que el soldado Peter fue elegido por la baronía dominante y el experimento no resultó ; en buena lógica , ahora debería aceptar la opinión de los que le auparon al poder.
Esta forma medieval de entender el poder es lo que tiene. Los militantes pintamos muy poco. Peter no es un líder y desaparecerá con ese equipo nefasto que quiere colonizar el estado y sus privilegios como si nada hubiera ocurrido.
Estamos viviendo el final de un partido bronco, desconectado de buena parte de la clase media urbana, cuyos votantes superan de largo los cincuenta años y más radicalmente de los jóvenes.
¿Qué esperamos del PSOE en este momento crítico ? Que ayude y sea formal y se deje de idioteces con un Podemos tan devastador ( casi tanto como la CUP).
Y como tiene menos votos que el PP, no aspire a esa humillación que propone Amistad para con el primero.
Y , naturalmente , acepte la voluntad a la que debe su existencia.
Mr Mulligan.
Rajopiyus no tiene el por que sentirse humillado porque el PSOE con su No a la investidura le cierre la posibilidad de ser presidente del gobierno por segunda vez.
Mas bien ,al contrario,tendria que sentirse orgulloso al permitir que Peter Sanchez evite unas nuevas elecciones con su voto favorable a ungobierno en minoria en el que por su fuerza parlamentaria podria tratar los asuntos de estado ,en igualdad de condiciones.
En el PP ,lo saben pero ellos consideran que el primer tiempo de este partdo eliminatorio,les pertenecen …..pero pareciera que en el PSOE hay quienes no se dan cuenta de que si no salvan al soldado Sanchez,se iran al carajo.
Peter Sanchez no se hará el harakiri por sentirse solo ante el peligro,si tiene que morir politicamente lo hará en presencia de los Leones Daoiz y Velarde…..ejem.
Asi que,Amistad Civica ,lo tiene muy claro,no pretende humillar a quien nos ha humillado,mas bien darle la oportunidad de hacer lo que no hizo durante su mayoria purgatoria:
Ser un hombre de estado….ejem…..jiji.
El análisis del articulista es muy amplio y señala varias posiblidades de superación del impasse actual. Me ha parecido interesante la que denomina «innovadora para tomar la iniciativa frente a Podemos y respecto a la plurinacionalidad de España.» Yo creo que podría ser una propuesta para conseguir un acuerdo con Podemos y algún otro y formar una coalición que pudiese formar gobierno sin necesidad de nuevas elecciones en mayo próximo. Los de Podemos quieren un referendum en Catalunya. Pues al Psoe no le cuesta nada ceder en hacer un referendum, pero no solo en Catalunya, sino de toda España por lo que sería legal, si logran aprobarlo en el Congreso. En el los votantes podrían decantarse por 3 alternativas: reforma constitucional de solo algunas cosas excluyendo aumentar el grado de autonomía actual de la constitución; Reforma constitucional para dotar de mayor autonomía solo a Catalunya y Eukadi; Reforma constitucional para aumentar grado de autonomía a todas por igual excepto las que tengan menor población. El Psoe lleva mucho tiempo queriendo hacer una reforma constitucional, pero por lo visto después de haber presidido el gobierno de la nación. No le cuesta nada formar una coalición con Podemos y otros con un único programa: un referendum nacional para saber que opinan los ciudadanos respecto al grado de federalismo que debe tener nuestras CCAA. Opinando si debe ser homogeneo para todas, asimétrico con baremos de población, PIB, lengua de cada CCAA actual. Es obvio que podría asi decantarse las preferencias de los ciudadanos catalanes, valencianos, andaluces, etc. Podemos, por tanto, no tendría que objetar a formar un gobierno de coalicion con un referendum nacional en vez de catalán u otro.