Magallanes

Después de las elecciones de los diputados para el Parlamento en 2011, finalmente el 23 de enero de 2012 llegó el momento histórico de sentarse por primera vez en el hemiciclo. El comienzo fue bastante caótico: los Hermanos Musulmanes obtuvieron en las elecciones una amplia mayoría (el 50% de los diputados) y, por tanto, debían imponer la elección ordenada de los distintos miembros de la dirección de la sala, empezando por el Presidente del Parlamento. Pero un miembro disidente de los Hermanos Musulmanes sembró la confusión proponiéndose como candidato. Total, que hasta bien entrada la noche no fue posible elegir al Presidente provisional. Ganó el candidato de los Hermanos Musulmanes El Katatni  por 399 votos a favor frente a  97 votos en contra.

A lo largo del otoño pasado se produjeron en la Plaza Tahrir  violentos enfrentamientos entre manifestantes y la policía, volviendo ésta a la brutalidad de tiempos de Mubarak. El más claro exponente de ello fue la foto en que  se ve a unos policías desnudando a medias a una mujer tirada en el suelo de la plaza. Dio la vuelta al mundo. Estos sucesos y el intento de los militares en el juicio a Mubarak para que no se condenase simultáneamente a ningún militar por la brutal represión ejercida antes de su destitución, hicieron que el gobierno  de EE.UU. se viera obligado  a distanciarse de la cúpula militar de Egipto. En una de las sesiones del juicio el fiscal acusó al Ministerio del Interior y a los militares de no facilitarle ninguna información sobre quién había ordenado disparar a los manifestantes. Estaba claro que los militares consideraban que más allá de la destitución de Mubarak, ellos no querían ceder el poder real a un gobierno civil del que pudiesen depender.

En el Gobierno de Obama se fue fraguando la idea de que no bastaba con seguir amenazando a los militares egipcios con suspender la ayuda anual de 1300 millones de dólares para que estos prosiguieran el proceso democratizador. Había que intentar acercarse a la principal fuerza civil, es decir, al partido Justicia y Libertad de los Hermanos Musulmanes (en adelante los HM). Después de todo, estos habían lanzado últimamente muchos mensajes de moderación y  seguir apoyando a los militares solo redundaría en un mayor desprestigio de EEUU. El primer paso para tratar con los HM lo dio el Senador John Ferry junto con la anterior embajadora en el Cairo Anne Patterson. La reunión fue muy cordial como pudo verse por los comentarios vertidos en el periódico de los HM y su página web. Una buena relación entre el gobierno estadounidense y el partido islamista era fundamental para  que en Egipto, EEUU no fuera considerado como el financiador y aliado de los militares. En Egipto han estado actuando varias ONGs con fondos estadounidenses, pero sus contactos han sido los jóvenes liberales  que fueron los principales autores de la revolución de la Plaza Tahrir. Los HM, al principio, no participaron en este movimiento, pero posteriormente sus jóvenes se unieron al movimiento democratizador con entusiasmo y con la aprobación de sus miembros mayores. La fuerza social enemiga de una democracia es el partido salafista (15% de los diputados), cuyo ideal sería una teocracia parecida a la de Irán. Y por una democracia más laica que la que aceptan los HM están los jóvenes liberales que protagonizaron la primavera árabe de la plaza de Tahrir. Desgraciadamente, solo obtuvieron el 10% de los escaños del Parlamento.    

Una vez constituido el Parlamento y su presidente, se va a proceder a crear una comisión para redactar la nueva Constitución. Se supone que esta comisión habrá terminado la redacción de la misma en Junio. Una vez aprobada se abrirá un periodo electoral para elegir un nuevo gobierno. Mientras tanto, el Consejo de las Fuerzas Armadas sigue siendo el único poder y como no se ha levantado todavía el estado de sitio, es un poder considerable. A la cúpula militar no le ha gustado nada el establecimiento de relaciones directas entre el Gobierno de EEUU y los HM y han hecho ver su descontento torpedeando a las ONGs que reciben dinero de EEUU. Han sacado a  relucir una ley que prohíbe  que las ONGs reciban financiación extranjera. En consecuencia, el 21 de diciembre han impedido coger el avión a  un estadounidense patrocinador con el pretexto de que están investigando si una ONG egipcia ha recibido fondos de EEUU. A finales de diciembre la policía registró varias ONGs  y el 31 de enero de 2012  se han refugiado en la Embajada de EEUU 6 norteamericanos temerosos de ser detenidos por la policía por financiar a ONGs egipcias.

Lo que está en juego es cómo va a abordar  la nueva Constitución la subordinación de las fuerzas armadas al Poder Ejecutivo civil. Sin duda la cúpula  militar va a intentar aliarse con los HM y el partido salafista para que dicha subordinación sea más bien nominal. Y también para que en el juicio a Mubarak no se condene por la represión durante la transición a nadie más que al propio Mubarak.

En definitiva, la redacción de la nueva Constitución y su aprobación parlamentaria en los próximos meses nos dará el resultado del juego entre los HM, los salafistas y los liberales y de las distintas presiones sobre estos grupos de los militares y del Gobierno de EEUU.