Incomprensible y temible

Carlos Hidalgo

No entiendo la política argentina. De verdad. No la entiendo. Mi amigo Thiago suele decir que puede resumirse en gente llegando a las manos mientras discute si Perón era de izquierdas o de derechas.

El caso es que Argentina pasó de ser una promesa de prosperidad para América Latina y el mundo a ser un fracaso de décadas, en el que la economía no deja de derrumbarse, la sociedad se fractura y todo sale mal milagrosamente, no porque los problemas surjan de la nada, sino porque surgen problemas cuando parece imposible que la cosa vaya a peor.

E insisto, con una política tan frenética e incomprensible que para los que vemos desde fuera es todo tan marciano, que ni siquiera sabemos si los naturales del país lo entienden. O si alguien es capaz de entenderlo.

Y ahora, mientras escribo esto, llega Javier Milei, un político que suelta absolutas chifladuras, mitos neoliberales hace tiempo desmentidos y que, básicamente cree que la mejor política económica es reducir el Estado al tamaño de Somalia, ese paraíso liberal. Y con unos puntos de vista en temas como el aborto, el cambio climático o las políticas sociales que tampoco son muy diferentes de los que pueda tener un señor de la guerra de Mogadiscio.

Milei, precisamente con esos puntos de vista tan radicales, un discurso y una estética que han calado en las redes sociales y unos mensajes simplones y agresivos, es el enésimo ejemplo de líder populista de ultraderecha próximo a alcanzar el poder.

Y lo peor es que los políticos convencionales de Argentina (si es que tal cosa existe) parece que poco o nada van a poder hacer contra él. Ya sean peronistas o de los otros, sea lo que sea.

El éxito de Milei le ha pillado desprevenido hasta a él mismo, que se ha visto obligado a recurrir a expolíticos de otros partidos para que ingresen en sus filas y le representen ante una clase política y empresarial que le teme.

Mientras escribo estas líneas los argentinos tomarán su decisión, Entre dos candidatos “convencionales” que no tienen nada nuevo que ofrecer y un iluminado ultraliberal que aboga por la dolarización de la economía y por cargarse todo el sistema, sin realmente ofrecer nada a cambio, excepto la promesa de que las cosas se arreglarán solas sin la intervención estatal.

Volviendo a las frases de mi amigo Thiago: “En Argentina siempre gana algo parecido al peronismo y luego hay fases en las que gana algo que no lo es, pero que luego tiene que huir de la Casa Rosada en helicóptero”. Veremos cuál de esas opciones pasa a la segunda vuelta.

4 comentarios en “Incomprensible y temible

  1. Totalmente de acuerdo con el articulista: incomprensible y aterrador. Espero y deseo, de todas formas, que Milei sirva como aglutinador para el otro candidato que pase a segunda vuelta. Y ahí volvemos a las andadas porque prefiero que sea el de «izquierdas» pese al desastre que supone, solo porque el de «derechas» me parece todavía peor. Pero en fin…

  2. Y mira tú por dónde que Milei solo consiguió ser segundo. Alabado sea el señor, el señor Massa en este caso.

  3. Argentina tiene la mayor cantidad de psicólogos per cápita en el mundo: cerca de 198 por cada 100.000 habitantes, de los cuales casi la mitad están en la capital argentina.
    Viendo el panorama político, pareciera que la insensatez no tiene remedio.
    Los votantes del Wassap quieren tomar las riendas del Mundo.

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