Inconvenientes de la bronca tabernaria (1)

Permafrost 

Siempre me ha fascinado morbosamente la capacidad de algunos comunicadores para rezumar un odio vitriólico en cada una de sus intervenciones. La insidiosa maledicencia de figuras como Rush Limbaugh o Ann Coulter encuentra en nuestras tierras una notable representación en personajes como Jiménez Losantos y sus adláteres de la corte de la ponzoña. Pero, antes de inducir su hastío, les advierto que mi incursión monotemática de hoy no tiene sólo por objeto documentar sino también reflexionar sobre algunas de las principales taras de la hipertensión mediática. Por otra parte, aunque mi referencia e inspiración inmediatas se hallen en el ruiseñor de la COPE y allegados, no hay nada en mis consideraciones que no pueda aplicarse de manera genérica a cualquier escupefuego del foro, sea cual fuere su tendencia o condición.

Empecemos con algunos datos relativos al año pasado: en enero de 2006, se admitió a trámite una demanda de ERC contra Jiménez Losantos y la COPE por intromisión ilegítima en el honor de sus dirigentes; ese mismo mes, la Audiencia de Madrid ordenó admitir una querella de Maragall por injurias dirigida contra César Vidal y la sociedad titular de la COPE; en abril, Vocento anunciaba la presentación de acciones contra la COPE por “denigrar��? al diario ABC; el 5 de abril de 2006, La Asociación para la Investigación de Medios de Comunicación (AIMC) decidió en asamblea general expulsar a Radio Popular por las “graves infracciones cometidas��? por el director de deportes de la COPE, José Antonio Abellán; en junio, Ruiz-Gallardón anunciaba su intención de querellarse contra Jiménez Losantos por presuntas injurias contra su honor y dignidad y menoscabo de su imagen pública; en julio, tres entidades cristianas catalanas presentaron una denuncia canónica contra la Conferencia Episcopal Española a causa de la COPE, ante el Tribunal de la Rota Romana. Ignoro la suerte que han corrido todos estos procesos (me consta que recientemente los tribunales han fallado a favor de ERC en su denuncia contra Jiménez Losantos; el incidente con la AIMC concluyó con una especie de arreglo entre las partes), pero creo que su mera existencia resulta significativa.

No obstante, cuando se afea la conducta de los navajeros de la tribuna, los interpelados y sus afines esgrimen con frecuencia un argumento al que conviene enfrentarse de inmediato. Lo importante, se aduce, no es la forma más o menos canallesca, sino el fondo, la veracidad de lo que se dice. Las maneras que adornan o deslucen el mensaje son algo accesorio, sometido a consideraciones caracterológicas, de oportunidad o incluso tal vez comerciales, pero, en cualquier caso, y aun concediendo que puedan ser eventualmente deplorables, los malos modos no dejan de ser un aspecto secundario y esencialmente prescindible.

No es casual que algunos de los máximos representantes de las filias y fobias del micrófono de oro copeliano ilustren este punto con particular pertinencia. Así, el alcalde de Madrid aseguró el año pasado en el foro Abc que su partido, el Partido Popular, debería huir de la «radicalización» del Gobierno, explicando que «sólo desde la moderación es creíble la firmeza y nosotros debemos ser firmes ante la agresión. Sería un error tremendo que nos contagiáramos». Esperanza Aguirre, en cambio, respondió a estas declaraciones asegurando: «Yo discrepo en el sentido de que creo que la moderación es como la buena educación, pertenece al mundo de las formas, no es un valor, el valor en el fondo es defender al libertad, la honradez, la dignidad de las personas, los derechos». El propio barón crispante ha hecho declaraciones muy reveladoras de esta actitud. Cuando un internauta pregunta a Jiménez Losantos, el 7.12.05 (Diálogo en LD): «Â¿No es usted una persona que utiliza un método de comunicación similar a los comunistas que denuncia?», la respuesta aclara inequívocamente la importancia del «fondo»: «Pues no, porque los comunistas mienten a sabiendas y yo digo la verdad». Por tanto, sus maneras destempladas son una cuestión de detalle, de puesta en escena. Cuando le preguntan en otra ocasión (Diálogo en LD, 17.5.06): «Estoy de acuerdo con muchas cosas que expresa en la Cope, pero ¿no cree que las formas hacen que los adversarios políticos utilicen sus expresiones para menospreciar lo que dice?», el divo banaliza la importancia de los modales: «Bah, gracias a esas formas nos oye cada día más gente. O se despierta a la gente o se la duerme. […] No [hay que] considerar negativamente ciertos aspectos de la política gubernamental en determinadas áreas. ¿Usted se despertaría a las seis con esta monserga?» Y, con mayor cinismo, en una entrevista para El Mundo (13.8.06): «Pregunta.- ¿Qué dicen sus hijos cuando le escuchan? Respuesta.- […] ‘¿Y no puedes decir eso de otra manera?’. Yo le respondo: ‘Ya, e ibas a estudiar tú en una universidad americana si lo digo de otra manera…’ «. Y, para terminar, Juan Souto Coelho ofrece una acabada formulación de esta idea bajo el expresivo título de «Verdad antes que buenas formas. El problema no es la COPE» (LD, 19.10.2005): «Contar la veracidad de los hechos incómodos para el poder político, contrastar y desenmascarar las medias verdades, es para algunos provocar crispación. […] El problema no es la palabra más o menos agresiva, violenta e indignada de algunos periodistas. El problema es lo que lo provoca. […] Tiendo a mirar con intensidad las estructuras del mal y con benevolencia las torpezas propias de la manera temperamental de ser de cada uno. Prefiero no escandalizarme con pecadillos comunes antes que escuchar música y comulgar con ruedas de molino ante las grandes perversiones y estructuras de pecado.»

Pues bien, afirmo que este argumento es falaz cuando se llega a ciertos extremos. Afirmo que hay un punto a partir del cual esa supuesta frontera entre el fondo y la forma se desdibuja y, de hecho, la forma es el fondo. Decir que se ha adoptado la decisión X puede ser más o menos veraz y objetivo. Decir que esa decisión se ha adoptado para acabar con la democracia y la libertad es una atribución de intención difícilmente reducible a una simple formalidad. Disculpen que descienda de nuevo al detalle, pero no deseo que esta cuestión se quede en una mera formulación abstracta. El pasado 7.5.07, en su programa «Federico a las seis», el Sr. Jiménez, en torno al minuto 7, se refirió en los siguientes términos a los jueces del Tribunal Supremo que se habían pronunciado sobre las listas de ANV: «A la pequeña historia de la gran destrucción de España pasaréis como una pieza más dentro de la estrategia de Zapatero. […] ‘Y el poder Judicial tampoco estuvo a la altura de sus responsabilidades: cedió al Ejecutivo y metió a la ETA de nuevo en las instituciones representativas vascas’. Es todo una chapuza, esto va más allá de la prevaricación, es la alta traición, pero la alta traición redomada. […] En la Sala 61 hay de todo. […] Pero al final se impuso la cobardía habitual. El centrismo de pan llevar. Y si además de pan es lo de Arenillas, ¿eh? Y otro cargo y otra promoción, en fin, lo típico. O sea, corrupción al por mayor.» No, amigos, sostengo que no es lo mismo no estar de acuerdo con una decisión que acusar de prevaricación, cohecho y alta traición a los jueces del Supremo. Estas imputaciones son en sí mismas afirmaciones «de fondo», sujetas a un juicio de veracidad. Son delitos de cierta entidad que, por añadidura, requieren dolo. Y es que, según el argumento al que me opongo, si no tuvieran importancia estas palabras, daría igual llamar a un etarra encarcelado por delitos de sangre “terrorista asesino��? o “preso político��?, algo que sin duda estas luminarias no estarían dispuestas a admitir. No es lo mismo criticar con toda la dureza que se quiera la política antiterrorista del Ejecutivo que decir que éste es «el Gobierno de la ETA» y espetar a los socialistas: «lo que pasa es que vosotros formáis ahora un paquete con la ETA. Estáis a medias» (Losantos, 27.2.06). O afirmar que «[estar] en la oposición a la ETA y a ti [ZP], […] por desgracia en España es lo mismo. Ha llegado a tal extremo de miseria España, que oponerse al Gobierno y a la ETA es lo mismo. Esta es la triste realidad» (Losantos, 7.5.07). Afirmar que se trata únicamente de una cuestión de «maneras» o de «formas», resulta un sarcasmo, sobre todo cuando tales formas se parecen mucho a determinadas conductas tipificadas en el código penal.

La semana que viene seguiré con este asunto, tratando de exponer razones adicionales que hacen altamente indeseable este estilo barriobajero y rufianesco.

15 comentarios en “Inconvenientes de la bronca tabernaria (1)

  1. Buenos días a todos! Después de varios días de ausencia, ya no sé ni por dónde empezar… Lo suyo es felicitar una vez más a Permafrost por sus estupendos artículos, ya no sólo por lo bien documentados que están siempre, sino por el «fondo».
    La forma y el fondo… Peliaguda cuestión. A botepronto, se me ocurre que para muchos, lo de guardar las formas es cosa de señoritas antiguas y cursis, ya sabeis, eso de tener buenos modales, siempre una sonrisa encantadora, y nunca una palabra más alta que otra. En concreto, los hombres de verdad, y las personas con carácter no han de verse limitadas por esa memez de las buenas palabras. ¿El talante? No me hablen de tonterías señores, que España está en peligro de extinción…
    En fin, a lo mejor soy una señorita antigua y cursi, y no me enterado, pero para mí, la forma es importante. Lo veo como una señal de respeto al adversario. Puedes estar en profundo desacuerdo con él, pero como esto es una democracia, la confrontación y la diversidad forman parte del panorama político, y siempre habrá enfrentamiento. Pero el reconocimiento a las ideas del otro, aunque se las critique, y muy duramente, implica un respeto a su persona.
    Siempre es posible tener un calentón y enfadarse, y que se escape alguna barbaridad. Pero lo de Fedeguico y los suyos no es calentón: saben perfectamente lo que dicen y por qué lo dicen. Su enfado visto así, es una tremenda hipocresía, y ese rasgarse las vestiduras, puro teatro.
    Por supuesto, hablo de demócratas, y entre demócratas. Igual ese es el problema: algunos, lo de la democracia, como que no se lo creen, o sólo toman la parte que les interesa.

  2. Asuntos pendientes. Como no ando bien de tiempo, también quería decir, brevemente, tanto a Millán como a Aitor que sus artículos me han gustado mucho. Estoy de acuerdo con el análisis sobre Josu Jon Imaz. Bienvenida sea su presencia. Claro que a veces pienso que andamos un poco alucionados. Casi no nos lo creemos después de tantos años con el eternamente cabreado padre Arzallus.
    Ah! Muy bueno el paralelismo entre la Aguirre y la zarina. La verdad es que esa mujer a veces resulta patética. Lo peor es que parece que va a ganar de calle. Es cierto que Simancas no es un gran candidato, pero ella, que encima ganó con trampas, tampoco es ninguna joya. Al contrario, es de las que más miedo me da del PP.
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    Una vez más, gracias por vuestros comentarios a mi artículo (sobre todo a Millán: así da gusto escribir).
    Qué tengais buen día!

  3. [El teclado britanico es lo que tiene, no entiende de ortografia espannola….]

    Muchas gracias por el articulo, Permafrost. Hoy estoy radicalmente de acuerdo con lo que dices. El problema de estos periodistas no es solo las formas, sino tambien el fondo. Llevan tres annos acusando al Gobierno de ZP de todos los malos de la humanidad. En breve, sabremos que el cambio climatico es obra de Rubalcaba, tras negociarlo con la ETA y hacer un pacto a tres con lo que queda del GAL -que, por su puesto, estos ultimos fueron los autores intelectuales del 11M-.

    La duda que tengo es: que hacemos? Les ignoramos? Les boicoteamos? Les aplicamos la Ley de Partidos? No se, no deberiamos de quedarnos de brazos cruzados. Estos sennores son un peligro para la democracia y su estabilidad. Quizas, lo mejor es dejar que la llama se apague sola…. «Alomojo», tras la inminente derrota de Marianico, las aguas bajaran mas tranquilas por la COPE. Veamos. Pero si la cosa no cambia, algo habra que hacer. Aqui no se puede insultar a todo el mundo y que luego te salga gratis….. Igual habria que crear un juzgado especial para las querellas contra periodistas. Asi, cuando hayan pagado unas cuantas multas por injurias y calumnias, se lo piensan dos veces a las seis de la mannana.

    Por cierto, es la primera vez que paso una temporada larga en el Reino Unido y los periodistas britanicos son buenisimos. Sus entrevistas son durisimas, pero nunca nadie pierde las formas. La educacion es lo primero. Que envidia!!! Es un placer ver contra las cuerdas a un ministro de Blair y ver como da respuestas inteligentes sin perder la sonrisa. Yo no quiero ser la BBC, yo quiero tener estos periodistas!!!!

  4. Buenísimo repaso. Por supuesto que la forma importa, eso lo aprendí yo más o menos a los 14. Igual es eso, que Losantos no ha superado la adolescencia, la carita de niño…

  5. No perderse la carta al Ekaizer de Conthe en el País de hoy, sección Cartas al director. La teoría del niño travieso. Qué personaje. Jiménez Losantos lo machacó esta mañana, ya no recuerdo bien por qué. Carlos Herrera se rió de él en Onda Cero. En las declaraciones de un personaje como este se basa el PP para poner denuncias por corrupción. Han perdido el norte. Esperemos que pierdan, además, las elecciones.

  6. Excelente análisis. Permfrost es muy cuidadoso, y se molesta en dar razones en cada paso de su argumento. Me permitiré el lujo de ser un poco más frívolo que él: el fondo es la forma. No, no es un juego de palabras: el fondo, lo que quieren transmitir los Losantos, Pedro J. y toda la demás gentuza del periodismo reaccionario español, es odio hacia el Gobierno, el PSOE y la izquierda. El fondo es ese: la destrucción de la izquierda mientras ésta gobierne. Por eso no se andan con contemplaciones. El apartente «fondo» da igual: da igual que sea ETA o el 11M, da exactamente igual. Todo son pretextos para poder poner en práctica la estrategia del odio al rival, su intento de destrozar la imagen de la izquierda mediante las más grotescas acusaciones. Un día es el 11M, otro ETA, otro las listas, otro Conthe, otro el Estatuto… El fin siempre es el mismo.

    Lo que es alucinante no es que haya dos o tres periodistas metidos en esa campaña. Lo alucinante es que sean legión: lean las columnas de la Razón, el Mundo o el ABC, escuchen a Carlos Herrera, asoménse a Libertad Digital, y descubrirán el odio en un estado casi tan puro como el de los batasunos.

  7. Sigo con Losantos. No es de Teruel? Si es así no es extraño que sea Teruel precisamente la capital de España que menos oye la radio (38%)

  8. Totalmente de acuerdo con Don Cicuta 6, no es que Losantos o el otro sean calumniadores profesionales, no, es una campaña bien orquestada que sirve a la estrategia del sector facha del PP que piensa que a) está justificada porque el PSOE es traidor, corrupto, mediocre y ladrón (de elecciones) y b) les funcionó muy bien en 1993-96.
    En cuanto al fondo y la forma todo el mundo sabe que la democracia es un sistema basado antes que nada en el respeto a las formas, iguales para todos tanto en derechos como en obligaciones. El fondo importa y mucho pero la forma es esencial, sin buenas formas no hay fondo que valga. Es un poco como lo del fin y los medios y a Losantos se le nota su leninismo originario ahora al servicio de la carcundia nacional.

  9. Lo sospechaba, pero después de ser ilustrado por el eficaz Permafrost, estoy convencido: no sólo es De Juana quien comete delitos de opinión.

  10. 8 MCEC
    Sí, concretamente de Orihuela del Tremendal. Tremendal, tremendo Federico.
    Siendo que Federico se ha marchado, no encuentro motivos para que los turolenses del éxodo no regresen a su tierra.

  11. 7 MCEC
    Ya no te asusta el libertinaje. Me alegro de que progreses adecuadamente.

  12. Esta claro que el odio es el motor de la derecha/extrema derecha. No hay más que ver a ese sujeto infame y enfermo que atiende por el alías de Mariscal Z. y se apellida del Valle de los Caidos, HT, por resumir. Semejante canalla suministra hoy su veneno a todos los Rajoy, Espes y Acebes que le quieren oir. Vende ética mientras se porta como un canalla.
    Estos especímenes son los que aportan el avituallamiento a las FAES. Resulta patético, pero entre estos anda el futuro alternativo de España.

  13. No se como van a reaccionar cuando pierdan las elecciones generales. Esta claro que estos sujetos no saben perder y se dedican a crispar, a crisparlo todo, cada vez que pierden. Recuperan el poder y desaparece la crispación.
    Les da igual llevarse por delante la política antiterrorista, la economía o el tan cacareado por ellos sentido común.
    Lo que resulta doblemente alucinante es que gente que se supone que es, o era, de izquierdas, les baile el agua y diga que son gente estupenda.
    Ojala pierdan las municipales y las generales, aunque nos den luego la murga crispadora.

  14. Que coñazo tener que escuchar no todos los días, no, pero si bastantes, las barbaridades que dicen no solo Jimenez Losantos, también señorito Herrera.
    Como les gusta decir a los de la derecha, ¿qué dirían de cualquier comunicador de la Ser que dijera que su tono se explica para poder pagar los estudios en una universidad de los USA a sus hijos?. Pues eso es lo que hace todo los días este nada piadoso sujeto apellidado Jiménez. No digamos ya las burradas que dice señorito Herrera, cuya única obsesión es contar todos los días los euros que gana con sus mitines tipo Queipo de Llano.

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