Llegó el tío Pedro con las rebajas

Carlos Hidalgo

Esperábamos crisis de Gobierno, pero no tan crisis como la que hemos vivido, con una escabechina de ministros y personas de confianza considerable. Y sus correspondientes reajustes, que aún enviarán ondas como cuando tiras una piedra a un estanque.

Por ejemplo: que Pilar Llop se vaya a Justicia, no sólo parece un mal pago a Juan Carlos Campo por los disgustos que se ha llevado con los indultos. También supone la salida de Llop de la presidencia del Senado y su adjudicación automática a Ander Gil. El mismo día en el que Susana Díaz “consiente” en ser senadora. Ahora senadora rasa, ni ministra, ni presidenta.

He de confesar que me ha sorprendido especialmente la salida de Ábalos. El exministro de Fomento era el número dos de Pedro Sánchez en el partido y su hombre de confianza cuando había que manejar situaciones difíciles. Es Ábalos quien ha negociado entre bastidores cuando había que llegar a acuerdos o dar grandes sorpresas. Y también es él quien ha recibido los golpes que en muchas ocasiones iban dirigidos al presidente. Pues ahora, lo haya hecho bien o mal, Ábalos sale a la vez del Gobierno y del partido, supongo que a la espera de un destino amable o puede que para aguantar el tipo como pueda como parlamentario, pues sigue siendo diputado por la provincia de Valencia.

Obviamente también está la muy comentada salida de Iván Redondo, el asesor que, como buen gurú de la comunicación política, se comía una y contaba veinte, como en el parchís. El relato, lo llaman. Tras acaparar progresivamente más y más poder, Sánchez le ha largado a él y a sus contrapesos en el Consejo de Ministros. Imagino que para crear otros nuevos. Dicen que de buenas, aunque Redondo hace ver que se ha ido porque quería y desde el Gobierno se filtra que nada de eso, que se le ha dado la patada. Sin duda le esperan más retos y puede que vuelva de otras maneras, porque en la política española, tras 2014, sigue siendo muy complicado predecir absolutamente nada.

Y es inesperado que se haya recuperado a Óscar López, otro de los “Blanco Boys”, junto al mismo Pedro Sánchez y los fulminados Antonio Hernando y Carlos Mulas. Y la verdad es que López es discreto, eficiente y conoce las tripas de las instituciones. Seguramente haga un buen papel sin querer quitar protagonismo al presidente, en la línea de Félix Bolaños o del olvidado (y a reivindicar) José Enrique Serrano.

A Carmen Calvo le ha pasado lo que a más de un ministro novato, que ha confiado más en su capacidad de imponer su autoridad que en sus habilidades de dialogar. Y me temo que la política consiste casi siempre en llegar a acuerdos con los demás o, al menos, escuchar educadamente sus opiniones. Calvo era más partidaria de autorizar o desautorizar y hacer valer su papel de vicepresidenta del Gobierno de España. Bueno, le ha pasado un poco lo que a los que han intentado hacer lo mismo, hombres o mujeres, de derechas o de izquierdas: se ha quemado y se ha asociado a conflictos, por lo que eres candidata más que razonable para salir en la siguiente mudanza. Queda en su haber que su incapacidad para dialogar ha hecho que el PSOE ya no se perciba como el partido feminista por excelencia, por azuzar peleas internas dentro del propio feminismo, y por alejarlo de la comunidad LGTBI. Ojalá haya quien recomponga lo roto.

Y recompuesta parece la relación con la parte del partido que no voto a Pedro en las primarias, Isabel Rodríguez y Pilar Alegría, que eran públicamente susanistas, pasan a ser ministras y se dice que con la intención de relevar a sus secretarios regionales, Page y Lambán, respectivamente. Primero habrá que ver si ellas quieren. Y luego, como nos ha demostrado esta crisis de Gobierno, la vida da muchas vueltas.

Mientras, en Podemos, siguen con un somnoliento ministro de Universidades, una polémica ministra de Igualdad, un ridiculizado ministro de Consumo, una Yolanda Díaz a la que sus propios correligionarios quieren poner zancadillas, e Ione Belarra, que se saca fotos en Instagram cambiando las letras de sus libretas del trabajo. Gran estrategia.

4 comentarios en “Llegó el tío Pedro con las rebajas

  1. De todo el articulo de Carlos a mí el párrafo que me da más lugar a la esperanza es el penúltimo, donde se augura un cambio para Page y Lambán. De Lambán voy a hablar menos porque le conozco poco. De Page diré que el sentimiento que mas me produce es vergüenza ajena y «que habremos hecho nosotros para merecer esto». Mira que yo soy de los que tengo asumidismo que el PP en Madrid se rie en nuestra cara, pues lo de Page en CLM es del mismo estilo: en 2015 no tuvo apuro en poner los cartles del PSOE en color morado podemos (era de llamar la atencion) y luego pactar con con estos, para ahora «voxear» constantemente, con una ley de alquileres «anti-okupas» o sallir protestando por los indultos. Puedo admitir la estulticia, pero la estulticia y el «facheo» juntos, no.
    Por favor, si, que los releven. Por lo que sea.

  2. Me ha salido una sonrisa picarona cuando he leído «Y recompuesta parece la relación con la parte del partido que no voto a Pedro en las primarias, Isabel Rodríguez y Pilar Alegría, que eran públicamente susanistas, pasan a ser ministras y se dice que con la intención de relevar a sus secretarios regionales, Page y Lambán, respectivamente. »
    Más que nada,porque sería «justicia divina» el que el «susanismo»desaparezca al mismo tiempo que «los voxiferantes» comentarios políticos de Page y Lamban….que como no saben defender a su gobierno de los ataques de las derecha se alinean con sus parámetros mentales para intentar «sobrevivir».
    Vergüenza ajena

  3. Si Cuba es una dictadura .
    Según el Partido Popular ,VOX y Cs:
    Si el presidente del Gobierno de España Pedro Sánchez es un felón dictador…ejem..
    España está en manos de una dictadura social comunista con la complicidad de etarras y separatistas catalanes.

    Ergo…

    España es una dictadura.

    Vaya…que cosas..JAJAJA…que nervios.

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