Carlos Hidalgo
No es una buena noticia que Pablo Iglesias renuncie a la vicepresidencia segunda del Gobierno y se proponga a sí mismo para ser el candidato a presidente regional de Madrid por Podemos. No lo es, de verdad.
La mejor manera de ganar unas elecciones a Ayuso, a mi juicio, es contraponer la sensatez y hasta una cierta normalidad al arsenal diario de chaladuras y baladronadas que despliega una presidenta inconstante, bravucona y a la que no se conoce que haya conseguido aprobar ley alguna. Y resulta que Pablo Iglesias da el salto para presentar su figura inconstante, bravucona y a la que no se conoce que haya conseguido aprobar ley alguna. Me apuesto mi mejor camiseta de Star Trek a que en la campaña electoral Iglesias nos obsequiará con un arsenal de chaladuras y baladronadas, para completar el cuadro.
A mi entender, una de las fortalezas de Gabilondo era la de que el discurso histérico de la derecha, que advierte contra una izquierda radical, se estrellaba contra su apacible figura (tal vez demasiado apacible). Porque llamar radical a Gabilondo es tan inútil como pretender que el granito es gelatina.
El paso de Iglesias, sin embargo, es recibido por entusiasmo por la derecha y la ultraderecha, que ahora sí que podrán gritar que viene el lobo sin sentirse tan ridículos.
El líder de Podemos lo fía todo a la grandeza de su gesto, pero es un gesto que a mí me recuerda el de los malos novios, que pretenden compensar sus errores diarios con espectaculares ramos de flores cada tres meses. Puede funcionar en las primeras ocasiones, pero está claro que ya es más un paripé para solucionar meteduras de pata que, por otro lado, no se pretenden solucionar. Y eso que no lamento que se vaya del Gobierno porque ya ha quedado claro que gobernar y esforzarse a diario no es verdaderamente lo suyo. Y sí soltar espectaculares faroles con muy malas manos.
La figura de Iglesias, una de las más antipáticas para todo el electorado, sólo va a conseguir que el electorado de Ciudadanos que se pensaba quedar en casa se movilice. Y que vote al PP.
En cuanto a sus intenciones de crear una “candidatura de unidad de la izquierda”, es vista por todo el mundo como una excusa para pretender dar la puntilla a Errejón que, por otro lado, tampoco pasa por sus mejores momentos.
Y me temo que el punto débil de Ayuso, que es evidenciar que dispara a ciegas y que no sabe lo que hace, ni lo que dice, va a estar bien a cubierto tras una campaña que preveo llena de palabras gruesas y fanfarronadas.
Gabilondo, que ya partía de varias desventajas, como el no estar respaldado por una organización política mínimamente competente, está ahora más en desventaja, si cabe. Porque es difícil que el sentido común, la moderación y la sensatez del candidato socialista consigan penetrar las andanadas de sandeces de Ayuso e Iglesias. Y lo que es peor, me temo que el candidato de Podemos quiera ridiculizar al catedrático y afearle su labor de oposición a la muy inestable Ayuso. Así que no, para mí no es una buena noticia que Iglesias se presente. Y va a movilizar más a la derecha -que ya estaba muy movilizada de antes- mientras que apenas conseguirá movilizar a la izquierda.
Puede que consiga algún otro de los objetivos que dicen que se plantea, como es el de evitar la desaparición de las pocas estructuras territoriales de Podemos que quedan en pie y así, esquivar el desastre de convertirse en fuerza extraparlamentaria. Pero tampoco me apostaría nada a que eso vaya a salir bien. Aún no sé quién le dirigirá la campaña, pero me temo que los Podemos querrán oponer a la lamentable figura de Miguel Ángel Rodríguez la no menos lamentable figura de Juanma Del Olmo, un experto en diseñar campañas contra los propios y en perder elecciones.
Estamos perdiendo una oportunidad única de reivindicar un mínimo de normalidad en un ambiente de creciente polarización e histerismo. Y se está dando otro paso más para convertir las elecciones madrileñas en un concurso de chaladuras. Ojalá me equivoque en todo.
Esperemos que si, que el articulista se equivoque en todo. O en casi todo. Pese a tener razón en todo o casi todo, a mi juicio. Porque bien pudiera ser que la derecha tuviera escaso margen de movilización y que el factor Gabilondo no sirviera en absoluto para atemperar el impacto de la campaña maniquea socialismo o libertad. Y que una candidatura conjunta de Más Madrid y Podemos consiguiera más escaños que la suma conjunta de ambos en la Cámara. Y que, rizando el rizo, Ciudadanos, que todavía co gobierna el Ayuntamiento, consiguiera rebasar el 5% y por tanto extender todavía más la proporcionalidad, dificultando así que la suma de PP y Vox llegue a la absoluta. Bien pudiera ser. Incluso que, una porción respetable de los indecisos opte por la sensatez y la cordura del catedrático ex ministro visto lo visto en ambos extremos. Y tampoco hacen falta que sean tantos.
Ya veremos. De momento lo que decía yo ayer de que podían pasar muchas cosas, se ha quedado corto.
Hay una frase para los discursos hiperventilados a diestra y siniestra.
«Hable con ira y pronunciará el mejor de los discursos que siempre lamentará». – AMBROSE BIERCE.
Pues eso,apliquense el cuento
… JAJAJA …. que nervios.
Yo tengo mis filias y mis fobias, que todos vosotros habeis entrevisto. Creo que no soy el único. Efectivamente Iglesias es un político que crea mucho rechazo ( no hay nada mas que verlo) y en muchas partes. Quizás convenga pasar por un tamiz las emociones y tratar de deslindarlas -a mi , les anticipo que tambien me cuesta-. Dicho esto, a ver, la campaña de Madrid ya chalada iba a tener lo suyo Es que ya estabamos con «socialismo o libertad» y que «el fascimo está en el lado correcto de la historia»… más todo lo que llevamos oído. No sé ¿eh?
Ojo Carlos, que esta bien hablar de chaladuras y mesura, pero hombre, despues decir que «Iglesias no ha aprobado ninguna ley» a ver, que estaba en el Gobierno de coalición ¿es que el gobierno de coalición no ha aprobado ninguna ley? Ni siquiera..yo que sé..un estado de Alarma o asi, que te suene, unas mediditas de apoyo a la economia..unos ERTE. Menos mal que empiezas mencionando sensatez y mesura…que si no…. Esto como hecho, ahora ya las opiniones y las percepciones.
Yo la verdad es que capto perfectamente el rechazo visceral que Iglesias causa en la derecha ( y en mas sitios ¿eh?, y en más sitios) pero entrando ya en el diferencial de rechazo y sus efectos… es decir, por tu candidato solo puedes votar una vez Lo dices en tu articulo ¿veias a la derecha poco movilizada? Yo no ¿eh?, que si, que ahora digamos, con mas ganas, pero en serio, metas el voto en la urna mas fuerte o mas flojo, lo metes una vez. («Socialismo o libertad» estaba ya la cosa así, repito)
En cuanto a las cuentas de la lechera con ciudadanos. Si, es muy libre, aqui reconozco que cada cual le podemos poner encima lo que queramos, pero vaya, que ciudadanos se presento ya en las anteriores elecciones jurando y perjurando no pactar con el PSOE, muy derechizado , que venian de Colón y tal(sin Iglesias eh? Iglesias no estaba)No se cuantos moderados dispuesto a encontrar atractivo a Gabilondo habia por ahi, pero las elecciones salieron como salieron.
Cosa 2, tambien aquellas segundas elecciones que se convocaron a finales de 2019 y sobre las que rapidamente se echo un tupido velo, iban a suponer no se cuantso votos de Ciudadanos para el moderado PSOE y el PSOE saco menos votos, menos escaños y el que se puso ciego fue v+x. Un poquito de por favor.,.como decia aquel, que lo de Cs desde hace mucho se parece a un objeto de deseo que luego en la realidad nunca se ha comportado como se proyectaba. Esto procurando usar datos (pocos) para apoyarlo. Los datos que hay.
En resumen. Que si, que Iglesis crea rechazo, pero su efecto en la campaña de Madrid creo yo que puede ser mover ese porcentaje de votos justo para que Ps supere el 5%. O no. Sin pacto con Mas Madrid (que parece que no va a haber) Lo de Iglesias es «con su pan se lo coma». Si se queda por debajo de 5%, el batacazo es monumental. Vamos, que ni escaño ni nada. Si supera el 5% se queda como mucho lo mas previsible a estas alturas, de jefe de un grupo de la oposicion. La verdad, no se que gana, porque no parece ganar mucho en ningun caso, y esto a mi me parece algo a señalar. Si ya vamos a achacarselo a una maldad intrinseca o a un problema de deterioro cognitivo..bueno, al menos dejemos que pasen un par de semanas de campaña antes de empezar ese melón.
Que la irrupcion de P.I. en campaña la va a poner peor. Ahi ya nos movemos en el terreno del «What If» pero para mi que esa hipotética diferencia esta entre 100 latigazos o 110, mas que entre 0 latigazos y 50. Creo que los dos conocemos la realidad madrileña a pie de calle y sobre todo al menos la de los ultimos tiempos. A mi, por cierto, que tampoco soy Iglesias, por llevar una camiseta con el emblema de un sindicato mayoritario, el verano pasado me increparon desde las mesas de una terraza con un «Madrid fascista, viva Hitler hijo de puta», eso, no se si «debido a que Iglesias se presenta en Madrid» ahora serian desde dos mesas.
Y que la presencia de Iglesias es la que va a evitar que los votantes de Cs se vayan a votar en masa ( o en una masa minimimamente apreciable) a Gabilondo..mira, eso ya es que , sinceramente…me parece , a tenor de lo visto, de lo oido, de lo vivido, poco, poco, poco verosimil. Eso si, viene guay cuando uno se pone a decir, «Iglesias me cae como una patada en los mismisimos y eso seguro que se tiene que notar en algun lao.» Un poco como el flogisto, ni lo veo, ni lo mido, a veces pesa mucho a veces pesa poco, pero es lo que me vale para que mi reaccion quimica cuadre.
Te lo digo como lo siento. A a mi Iglesias no me provoca un especial rechazo, lo cual no significa que me caiga bien, o que le vote..pero claro, con un personaje asi, en cuanto no le pones verde, no tardan en ponerte la hoz y el martillo al hombro, sin preguntarte ni nada.
Ah una cosa en la que si que coincido. La metafora del novio. Yo ayer con unos amigos hacia una del estilo, solo que yo usaba a Curro Romero, que solo estaba para cuando el toro le gustaba. Entonces sí, si no…
De acuerdo con que el coletas, además de rechazo, también genera adhesiones, incluso después del leninismo interno, el chalé, etc. Para mí que Podemos no solo supera el 5% sino que sube en escaños: creo que ahora tiene 7, no? No olvidemos que Más Madrid era Errejón y ahora es esta chica tan maja a la que nadie conoce. Veremos, mucha tela por cortar. Pero sí, yo creo que la movilización de la derecha ya era máxima y Gabilondo no la desactivaba, todo lo más a los indecisos, abstencionistas del PSOE y Ciudadanos desamparados.