Siria en la espiral

Lobisón 

Los rumores sobre la posible anuencia de Rusia a una nueva resolución contra el régimen de los Asad, en la Asamblea General de Naciones Unidas ya que no en el Consejo de Seguridad, implican que la diplomacia rusa es cada vez más consciente de que su posición es insostenible. Lo que es otra manera de decir que comienzan a creer que el régimen no tiene salvación. Eso, como diría Robert Redford en The Hot Rock, es bueno y es malo.

Es malo porque significa que están perdiendo la confianza en una salida negociada, y que ven inevitable el agravamiento del conflicto hacia una guerra civil. Perece que los hermanos militares bloquean la posible voluntad del hermano oftalmólogo —al que el azar convirtió en presidente— de llegar a una solución política. Falta aún ver lo que sucederá con el referéndum sobre la reforma en un sentido pluralista del régimen, pero casi nadie, comenzando por la oposición, parece creer en ese cambio.

Mientras, lo que inicialmente fue brutal represión militar de la oposición pacífica ha dado origen a una resistencia armada, en la que participan desertores de las fuerzas armadas y voluntarios yihadistas de toda la región. Siria se ha convertido para ellos en un polo de atracción, como lo fueran antes Chechenia y Bosnia, lo que augura una muy mala evolución de la actual situación.

Bachar el Asad insiste en que hay países vecinos que están interviniendo en Siria, y es muy probable que tenga razón. El integrismo suní de Arabia Saudí ha encontrado una buena oportunidad de combatir la influencia chií de Irán en la región, y cuenta con los recursos económicos y humanos (voluntarios fanáticos) para atizar la crisis del principal aliado que le queda a Irán fuera de la errática situación de Irak.

Por supuesto, no se puede permanecer de brazos cruzados ante el espectáculo de un gobierno que masacra a su pueblo, pero crece el riesgo de una sangrienta guerra civil, y, lo que es peor, de que ésta no conduzca a una solución institucional democrática. Nueve años después de la invasión de Irak es fácil hacerse a la idea de lo difícil que es la convivencia democrática en una sociedad con profundas divisiones sectarias.

Parece que más de la mitad de los sirios respaldan el régimen actual, entre ellos los cristianos y sobre todo los alauíes, la minoría de la que procede la administración de los Asad. Si el régimen es derrocado estas confesiones serán probablemente víctimas de represalias y por tanto de violaciones de los derechos humanos tan terribles como las que estamos viendo ahora.

Y en esa sociedad dividida hay que contar con que Irán apoyará a los alauíes, a la vez que crece el riesgo de un ataque israelí a Irán, lo que puede conducir al cierre del estrecho de Ormuz. No sólo habría guerra, sino el riesgo de un nuevo golpe a la ya dañada economía global. Ya se sabe que los comienzos de siglo tienen mala fama, pero éste parece empeñado en justificarla.

9 comentarios en “Siria en la espiral

  1. «Bachar el Asad insiste en que hay países vecinos que están interviniendo en Siria, y es muy probable que tenga razón.»

    Es probable, sobre todo porque nadie como él -destacado miembro de una familia de asesinos en serie- sabe muy bien lo que es intervenir en países vecinos. Que se lo pregunten a los libaneses,

    «Si el régimen es derrocado estas confesiones serán probablemente víctimas de represalias y por tanto de violaciones de los derechos humanos tan terribles como las que estamos viendo ahora.»

    Menos lobos. El régimen actual tiene récords difíciles -por no decir, imposibles- de superar en ese sentido. Por muy criminales que se mostraran unos hipotéticos nuevos mandamases sirios -y seguro que algunos lo harían-, nunca podrian alcanzar la eficacia de ese «puño de hierro en guante de seda» (que decían algunos ilustres analistas de la prensa española, cuyo nombre mejor olvido). Ni siquiera el fascismo teocrático iraní ha conseguido tales logros.

    Por lo demás, hace muy bien Irán en temer que la caída del régimen sirio estreche el cerco sobre el suyo propio. Y seguro que les gustaría cerrar el estrecho de Ormuz. Pero querer no es poder. No es lo mismo prohibir a sus comerciantes celebrar San Valentín -«para evitar contaminación occidental»-, que bloquear Ormuz frente a las narices de la V Flota de EEUU. Respecto a Ormuz lo único fácil para los ayatolás es la fanfarronada.

  2. Barañain, menos mal que en estos casos siempre se puede contar contigo.

    Sobre los riesgos de cristianos y alauíes si cae el régimen actual, no pienso en las actuaciones del nuevo régimen sino en el desorden y el terror que podrían desencadenar los yihadistas, y la violencia sectaria en general. O sea, que como todas las personas simples pienso por analogía, en este caso con Irak.

  3. Si no iniciado, queda claro que esta rebelión está muy alentada y sostenida por Arabia Saudi y otros vecinos como Catar, que sería quien controlara el resultado si la rebelión triunfa. No sé qué tiene de mejor el régimen de Arabia Saudi, el más cerrado, autocrático y radical del mundo, que Siria o Irán. Quizás el no dejar que se mueva ni un pelo y que nadie en el mundo sepa absolutamente nada de lo que se hace allí. La doble vara de medir ya resulta excesiva

  4. A ver señores, qué es eso de escribir y opinar sobre los dominios de otros? Aquí el arabista soy yo hasta que no se demuestre lo contrario.
    Los Assad son unos dictadores, unos jetas por vivir como dios a costa del resto, y unos capullos, que no tienen problema en matar si resulta conveniente. El padre era de armas tomar, nunca mejor dicho, el tio (que hizo de las suyas por Marbella) igualico y el hijo muerto apuntaba maneras. El segundón que manda hoy no es tan asesino porque para eso ya está su otro hermano, que dirige uno de los servicios de seguridad.

  5. Otra cosa. Los Assad han puteado al Líbano pero eso no quita para que el Líbano, de toute la vie, fuera parte de Siria, hasta que los franceses lo desgajaron, más o menos como Kuwait fue desgajado por los ingleses de Irak.
    En fin, Siria es un lío étnico-confesional-tribal y cuando desaparece, como lo hará, una dictadura férrea, es inevitable un poco de caos. La cuestión es que muera la menor cantidad de gente posible y que dure lo menos posible. Ese es el escenario menos malo, desde luego mucho menos malo a que continúe la situación actual, como también es el caso en Libia.
    Los yihadistas, concepto en el que generalmente se mete a todo tipo de pandillas armadas aunque no lleven barba, no dominarán Siria aunque contribuyan al follón inicial.

  6. Rusia tiene una base naval importantísima en Siria. Fuera de las del Mar Negro y Mar Báltico, que pueden ser bloqueadas por el hielo, Dardanelos o estrecho entre Suecia y Dinamarca, no puede surcar su pabellón por los mares con total independencia. Lobisón esperaba que Rusia votaría a favor de la condena. No ha sido asi. Ha invertido mucho dinero en esta base. China tampoco simplemente por la rabia de lo ocurrido en Libia.
    En Siria se está librando la gran guera en el cercano oriente entre Chiíes y Suníes. Menos mal que en Egipto no hay chiíes (uno menos para alimentar el fuego), pero en el resto de paises musulmanes los hay. Por un lado tenemos a Irán y Hesbollah en Líbano apoyando a Assad. Los rebeldes suníes de Siria ya han capturado a 6 soldados del Qudz (fuerza de choque del ejercito revolucionario de Irán) en los enfrentamientos con las fuerzas de Assad. El problema es que Turquía, después de varias décadas de buena amistad con Siria e Irán, se ha puesto del lado de los rebeldes sirios. Al principio intentó convencer a Assad de que hiciera reformas, pero al ver su total cinismo, se fue pasando a apoyar a los rebeldes. No hay que olvidar que los turcos son musulmanes suníes. Obviamente no hay envios aparentes de armas. Está claro, si hubiese noticias de que les apoya militarmente, Teherán mandaría miles de Qudz y Hesbollas y no se habría acabado con Assad. Pero el enfrentamiento entre Turquía e Irán se esta agravando rápidamente. Curiosamente los kurdos se están convirtiendo en escudos humanos en este enfrentamiento. En efecto, el partido de los trabajadores kurdos, situados en las montañas entre Turquía, Irak e Irán, conduce ataques esporádicos contra Turquía reclamando su autonomía. Lo hacía desde Irán hace mucho, pero cuando las relaciones entre Turquía e Irán eran buenas, Irán consiguío eliminar o neutralizar a los kurdos que operaban desde su territorio. Ahora les ha vuelto a dar rienda suelta para atacar a Turquía. Se calculan unas 150 bajas de soldados turcos en los últimos 6 meses.
    En Irak manda el partido de Al Maliki que es el de toda la población chií. La marcha de los norteamericanos, agravó las tensiones entre chiíes y suníes. Pero nuca se pensó que Maliki iba a dar orden de arresto de uno de los principales dirigentes del partido de los suníes que además era vicepresidente. Este escapó, refugiandose con los kurdos del norte de Irak. Enfin, Turquía no ve con buenos ojos que Irak se convierta en un fiel aliado de Irán y está dispuesta a favorecer al máximo al partido de los suníes iraquíes.
    El estrecho de Ormuz está bien guardado por 2 portaviones de EEUU, pero siempre cabe la posibilidad de que, para ayudar a Assad internacionalizando el conflicto sirio, lance barcos hacia el estrecho con bombas que los hagan hundirse en medio del estrecho con lo cual dificultaría extremadamente la salida de TODO el petroleo proviniente no solo de Irán, sino también de Kuwait y otros emiratos. Enfin, que no solo los ciudadanos de Homs están sufriendo a lo bestia sino que también la economía global, como dice Lobisón, puede sufrir un sufrimiento mas leve pero muy grave.

  7. No se,pero me da la sensacion que cualquier «periodista» de los medios informativos de este pais,sentiran verguenza de sus articulos,al leer tan buenos articulos y comentarios que salen por este lugar de encuentro y debate democratico,uno se siente orgulloso de leer a los amigos que le rodean…..jeje.

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