Carlos Hidalgo
La ucronía es un género literario en el que se cuenta una historia alternativa, que se basa en hechos posibles pero que no ha sucedido realmente. Ya sabéis, historias sobre un futuro en el que el Eje hubiera ganado la Segunda Guerra Mundial, como Patria, la de Robert Harris, o El Hombre en el Castillo de Philip K. Dick. Hay ucronías de mayor y menor calidad, pero en general siguen la norma literaria conocida como “Revelación de Sturgeon”, que afirma que cuando se trata de literatura de género, “el noventa por ciento de todo es mierda”.
El profundo impacto que la crisis sanitaria del Covid-19 ha tenido en todos nosotros y a nivel mundial, hace que muchos se pongan a practicar con mayor o menor éxito la ucronía. Lo que desde las filas próximas al gobierno se denomina con ánimo despectivo ejercer de “Capitán A Posteriori”. Así, parece que ahora hay momentos clave que nos pudieron haber evitado al mismo tiempo sufrir la pandemia y la crisis económica derivada de ésta. Desde la derecha, la ultraderecha y los que se dicen de centro, se sitúa la manifestación feminista del 8 de marzo como la causa de todos los males.
La ucronía viene a decir que las pérfidas mujeres feministas y sus aliados del malvado Gobierno convocaron una manifestación para reivindicar los derechos de la mitad de la humanidad con el ánimo de contagiar alevosa y masivamente el virus, colapsar nuestra economía y, de paso obligar a la Comunidad de Madrid a maltratar a los ancianos en sus residencias y negarse a atenderlos en los hospitales. Si no se hubiera convocado esa manifestación, parecen decir, la ucronía resultante sería que España se hubiera librado de la pandemia que sufren todos los países y sería una isla de prosperidad económica en un contexto de parón económico mundial.
Hay variantes, todas dejando ver que el Gobierno tiene la intención de maltratar a la población y colapsar la economía aposta. Como el momento en el que se dice que es mejor llevar mascarillas, cuándo se implantaron las medidas recomendadas por la OMS, o si las medidas de confinarnos para evitar el contagio son, en realidad, un intento por hacernos prisioneros en nuestros propios hogares, con el absurdo propósito de “controlarnos” para no se sabe muy bien qué.
El caso es que ningún país, ninguno, en el mundo es una isla frente al Coronavirus. Ni siquiera el que es literalmente una isla: Nueva Zelanda, a quienes parece irles algo mejor. Y que nadie se libra de las crisis mundiales. Nadie. Más tarde o más temprano te llega, como llegó a todos los países la crisis de 1929 o la depresión económica tras la Primera Guerra Mundial, que también golpeó a la neutral España, sólo que un año más tarde que a los demás.
Y la manifestación del 8M concentró a mucha gente, pero menos que el fútbol, las aglomeraciones diarias del transporte público o los abarrotados aviones que iban y venían, con las aerolíneas buscando la manera de meter a tres pasajeros en el sitio de uno.
Tampoco son de mejor calidad las fantasías que afirman que vivimos en el mejor de los mundos posibles y que la mera presencia de Podemos en el Gobierno hace que los parados cobren el paro, como si eso no hubiera ocurrido antes, que el personal de la sanidad pública se desviva por curar a la gente, como si no llevaran haciéndolo desde que existe, o que haya medidas de alivio para trabajadores y pequeños negocios, como si no las hubiera habido antes o como si no existiesen en los países de nuestro entorno.
Hay tantas cantidades de ucronías que yo, siguiendo la Revelación de Sturgeon, me pregunto dónde estará el 10% bueno.
Pues aquí dice otra cosa :
https://www.elespanol.com/espana/politica/20200609/iglesias-conocia-dia-situacion-dramatica-residencias-criminaliza/496201564_0.html
Veremos que dicen los jueces . No obstante , parece que en las demás autonomías no gobernadas por el PP , todo ha ido mucho mejor. Como saben no me fío de Iglesias y mucho menos cuando entra en resonancia con el Presidente resistente . Sobre todo lo más urgente es que no haya comisiones de investigación en los parlamentos ya que visto lo visto solo sirven para perder el tiempo imitando de modo rústico a Otto Preminger en la gran “ Tempestad sobre Washington ” con los zascandiles de Patxi López y Simancas imitando a Henry Fonda y Charles Laughton .
El mundo está en un perpetuo cambio y esta complejidad tan absoluta genera una cantidad infinita de posibilidades.
¿Qué es la realidad?
El hombre siempre tropieza con la misma piedra:¿que hubiera pasado si..?
Todo lo que hacemos puede conllevar un cambio en el universo; incluido lo que no hacemos y entender que todo es relativo y está en constante evolución es importantísimo. Por lo tanto, nunca será la misma respuesta para ti, ya que tu vida habrá evolucionado desde la última vez que te lo preguntaste..
Las Ucronias mentales no tienen nada que ver con la realidad que conocemos ,es un mero escape recurrente que a unos les permite reafirmarse y a otros seguir preguntándose que coño hago hoy para no caer en la trampa en la que me intentan hacer caer,aquellos que ni escuchan ,ni oyen lo que no quieren escuchar ni oír.
Vaya un bumerang que nos acaba dando a todos en la cabeza.
Lo más importante de la ironía de «El hombre en el castillo»es que Philip K. Dick lo escribió siguiendo «los oraculos» que surgían del libro I CHING.El libro de las mutaciones.
En la politica española las Ucronias son producto de los mundos para lelos..
Ante mi doy fe.
AC/DC.
firmado ….JAJAJA…que nervios.
Conozco «Patria» y conozco «El hombre del castillo alto», la ucronía a la que se refiere Carlos Hidalgo no la he seguido mucho, porque en el primer episodio ya me la veía venir y a esos guionistas ya los tengo muy calados. Recuerdo obras de gran repercusion en su dia como las vacaciones de Manuela Carmena en un chalet alquilado con unos amigos e incluso cortando una flor que era protegida. Creo que pertenecen al 90% ese del que hablaba.
Hablando de ucronias voy a recomendar dos, «El Reich africano» de Guy Saville, como novela, y como podcast «Historia ficcion»(@FiccionHistoria). Si no han tocado el genero podcast, haganlo, porque los hay buenos, eso si , recuerden el principio de Sturgeon aqui también.
Laertes,no seas de los que ven la película o la serie porque les aburre pasar las hojas de un libro.
Lee a Philip K Dick …jeje.