Manuel Lobo
Estos últimos días hemos leído en las noticias las protestas del campo por los precios que les pagan y lo caro que están estos productos en el comercio y quizá rompiendo lo que los partidos de izquierda promueven a voz en grito, quiero dar mi opinión de “cuñado”.
Lo primero que quiero poner sobre la mesa es mi impresión del sector agrícola y ganader, donde a pesar de obtener un producto de primera calidad, no han sabido o querido posicionarlo adecuadamente en el mercado para que a día de hoy sea un negocio rentable y no estar penando todos los años con la misma queja.
Dos ejemplos para ello… el aceite de oliva y el prosciutto italianos. Dos productos de fama mundial, a pesar de no ser ni los mayores ni los mejores productores. En alguna conversación con gente vinculada a los pueblos productores, se quejan amargamente de cómo los italianos han conseguido posicionarlos a nivel mundial y venderlos con precios muy elevados respecto a los precios nacionales y cómo no, respecto a lo que compran la materia prima.
No son pocos los olivareros que les era más cómodo vender olivas a granel o aceite sin refinar por cisternas a estos comerciantes italianos, haciendo un buen dinero de forma fácil, sin quebraderos de cabeza… entregaban el producto a la cooperativa y esta lo vendía rápido sin apenas proceso… ¡¡para que complicarse la vida!!
Con el jamón curado, algo parecido, ¡Qué difícil es encontrar jamón serrano cuando viajamos fuera y que fácil ver prosciutto, a pesar de ser un producto similar, pero de peor sabor!
Cuando en tu negocio dejas una parte importantísima como la distribución y puesta en valor del producto en otras manos, corres estos riesgos, más con un producto con fecha de caducidad y no puedes jugar a almacenar a esperar precios mejores. Pero es que dejan dos de las cuatro variables del marketing en manos de otros.
Además, el valor del producto no sólo está en lo que recogemos del campo… estoy seguro que muchos de nosotros lo rechazaríamos por la apariencia que tendría y por la enorme variabilidad del mismo.
Un ejemplo con las naranjas…
Si vais a comprar, ya sea a la frutería de barrio, a estas modernas autoservicio o a un supermercado, veréis que todos seleccionamos la pieza que nos queremos llevar. Queremos una pieza lo más grande posible, limpia, brillante y sin defectos… la queremos en la puerta de casa, todos los días, lo más fresca posible y con garantías que no nos va a dar ningún problema sanitario… queremos además llevárnosla en una bolsita (mejor de papel) para que no se mezcle con el resto de la compra. Por supuesto queremos que la tienda sea bonita y agradable…
Todo esto es lo que habrá que ver si vale 1,32 € que decía alguna secretaria de estado…
Cual es la ruta de esa naranja desde el campo a la mesa…
El pequeño productor del que hablamos pasa dificultades, vende la naranja… cambia de manos… a una empresa distribuidora…
Esta empresa tiene que transportarla al centro de almacenaje y manipulado, donde tendrá que clasificar estas naranjas por tamaños, desechar las que estén en mal estado, lavarlas, registrarlas para tener su trazabilidad de calidad y embalarlas en cajas para ser transportadas a los mercados centrales.
En estos mercados, deben venderla a los comercios minoristas que después la venden en los mercados. Hay que tener ese espacio en el mercado, descargar el camión, llevarlo al espacio asignado en el mercado central y dedicar recursos a venderlo al minorista… ¡¡no son los únicos que venden naranjas!!
Llegamos al final, este minorista debe transportar la fruta adquirida en el mercado central y llevarla a su puesto o tienda, preparar el expositor y venderla incluso por unidades a nosotros los consumidores…
En caso de un supermercado, los pasos son similares, cambiemos mercado central por centro de distribución logístico con su reparto a cada supermercado; cambia el agente pero no los pasos.
En un mundo donde el consumidor exige tanto, no podemos caer en los simplismos de restar del precio de venta en comercio lo que se paga al productor en origen. Son productos donde su precio es relativamente bajo, donde el manipulado es pieza a pieza (aunque esté mecanizado y automatizado) y se vende incluso por unidad, con riesgo de perderlo al tener caducidad.
¿Por qué el productor ,si ve injusto que haya tantos intermediarios que “ganan” más que él, no ha integrado verticalmente su negocio e intenta quedarse con esa ganancia?
¿Por qué el sector es de los menos tecnificados y digitalizados para conseguir mejoras de productividad? (en este sentido, esta misma tarde Santiago Niño comentaba el ejemplo de Holanda, donde, gracias a la tecnificación ha pasado de importar pepino, a ser exportador).
Flaco favor hacemos al sector si entramos en el juego de buenos y malos y buscamos una solución intervencionista en precio. Busquemos que el productor sea empresario, analice donde está el valor y trabaje por obtenerlo, que apueste por mejorar la productividad, tecnificar el sector y hacerlo competitivo… Nunca en la historia, la fijación de precios o el proteccionismo han tenido los efectos de mejora general de la economía. Sólo sirven para transferir renta de todos a los productores y generar efectos perversos en el funcionamiento de la economía a corto plazo, que, cuando se acaban, deja un sector económico peor.
¿ Por qué nos atormentan ? Es claro que el Ministerio de Agricultura es el vicario de Ceres en la Tierra. Sus ministros son especialistas en áridos y en el Consejo hablan los últimos , en la sección ruegos y preguntas. Es el campo silente y lunar . En él nace la hoz, la mitad del símbolo redentor materialista y el tractor , que no puede volar y se ha convertido en símbolo nacionalista.
Inesperado para Sanchez , brutalmente sincero en su ignorancia , no se le ocurre nada mejor que atacar a lo que conoce , los súper , para que se hagan una autocrítica, que en palabras de un personaje silente , como el secretario general de la UGT , son los responsables .
El figurín de la Moncloa se incomoda. ¿ Por qué no montáis el pollo cuando Rajoy ? No se ha enterado lo que significa gobernar.
Hola.
La mayor parte de los productos agricolas españoles se exporta. de hecho las exportaciones agricolas son uno de las principales fortalezas del sector exterior español.
Ha habido movilizaciones del mismo tipo en varios países europeos. Sin ir mas lejos en Alemania, los tractores tuvieron bloqueado Berlin un par de días. Los tractores. Berlin. No se podia llegar al aeropuerto.