¿Siempre hasta la victoria siempre?

Senyor_G

Si no recuerdo mal de las memorias de Tísner, y de algún otro lugar, existió la orden o la idea de algunos de los soldados republicanos que retrocedían hasta pasar la frontera francesa, cayendo toda Cataluña, de volver al frente por Valencia. No sé si eran indicaciones del gobierno republicano, si eran ideas de los comunistas o de quién era tamaña muestra de voluntarismo a aquellas alturas de una lucha que la España democrática sólo podía dar por perdida.El ejército franquista llegó a la frontera hispano-francesa en Cataluña el 10 de febrero de 1939 y ocupa Llívia el día después. Ahora sé que mi abuelo Dionisio el día 2 de febrero está internado en el Batallón de Trabajadores nº 9, 2ª compañía, pasando por o estando en Miranda de Ebro. Prisionero de guerra. No le conozco otras militancias posteriores que escuchar la Pirenaica y creo que votar al PSOE. Suficiente ir de Fondón en la provincia de Almería, al Ebro catalán, de frente en frente, y en algún momento posterior a la derrota caer prisionero de los nacionalistas de Franco para ir parar a Miranda de Ebro a un batallón de trabajos forzados. Tampoco le conocí disfrute de las vacaciones del IMSERSO, no debería tener muy buena opinión por entonces de la organización de viajes del estado español. Podría conjeturar mucho más pero no quiero todavía.

Me imagino que debió pasar muchos miedos, miedos reales.

Me chocó estos días atrás ver en la ficha parlamentaria de Marcelino Camacho[1] su obstinación por -escapando después de la guerra de un campo como el de mi abuelo- volver a entrar años más tarde, en 1957, a España como militante comunista para seguir la lucha organizando CCOO y el PCE en el interior con lo que le conllevó: multas, detenciones, juicios y hasta 14 años preso. ¿Qué lleva a una persona a esa determinación de seguir y seguir en la lucha por más justa que sea? Y más visto con los ojos que tenemos ahora, con nuestra poca imaginación para pensar en una España y un mundo radicalmente diferentes.

Dentro de la racionalidad de las izquierdas, algo nos ha tocado mucho con fe. Un Jorge Semprún, resistente anti-nazi en Francia que acaba en un campo de concentración, decide volver a España a organizar al PCE como máximo dirigente en el interior. Fe, voluntad, pensar en algo más que en nosotros mismos. Explica Jorge Semprún que sabe que han detenido a Simón Sánchez Montero y que éste conoce el piso franco en el que vive, debería abandonar el piso y buscar otro lugar porque lo razonable es que después de la torturas Sánchez acabe confesando dónde está ese piso. Semprún piensa que Simón aguantará y que si abandona el piso sería como perder la fe, como traicionar al compañero y no se va. Ninguno de los dos falla.

Pero que nunca nos falte el humor. Desconocía la revista satírica valenciana La Traca, de antes de la guerra, que toma partido claramente por el antifascismo durante ella y que va a saco contra Franco, Queipo de Llano y el resto de sus generales. Su director Vicent Miguel Carceller y su dibujante Carlos Gómez “Bluff” son fusilados el 28 de junio de 1940 en Paterna.

El segundo por haber reincidido en el delito, ya que en los meses anteriores en que había estado recluido en la prisión de de Valencia colaboró en la publicación Redención y las autoridades penitenciarias detectaron “historietas de doble sentido, contrario a la España nacional-sindicalista”. Un doble sentido no de todo clarificado, que hacía furor entre los presos republicanos. La revista dobló suscripciones en pocos números.[2]

He traducido este párrafo tal cual del artículo de Vicent Sanchís, y aún me alucina, me admira. No sé si es voluntad de lucha o si, como en el caso del escorpión, iba con su naturaleza. Pero a mí admiración en todos los casos aquí toma derroteros inauditos, no sé si por su compromiso antifascista o sólo con un humor que es más fuerte que uno.

¿Hasta dónde merece seguir en el camino a la victoria? En la propia convicción.

La primera pregunta que le hizo a Semprún, ya fuera del PCE, un Sánchez Montero fuera de la cárcel desde 1966: “¿Qué hiciste el 17 de junio?” “Me fui a casa”. Entonces Simón soltó un suspiro de alivio.[3]

[1] A raíz de los currículos formativos inflados de diputados actuales en frente de otros que habían sido fresadores o torneros.

[2] Traducido por mí de El món d’ahir nº6: “La Traca invisible”, article de Vicent Sanchis.

[3] De “Autobiografía de Federico Sánchez” según consta en “Lealtad y traición. Jorge Semprún y su siglo” de Franziska Augstein.

10 comentarios en “¿Siempre hasta la victoria siempre?

  1. La necesidad de sentido , la teología de sustitución que incorporan las nuevas teorías emancipadoras de las injusticias lacerantes de la revolución industrial , la mitomanía, el resentimiento, y la fe que menciona el articulista, llevaron a una lucha que llevaba en su seno la semilla del crimen y la opresión. Le falta al titulo aquello de Patria o muerte , venceremos. Existe bibliografía muy seria que incide en el carácter globalmente negativo del movimiento comunista y en el aparente misterio de su pervivencia o retorno cíclico después de su fracaso sistemático y sin excepción.
    La fe en la lucha , el tesón y sacrificio pueden inspirar actos heroicos y también ayudar a instaurar regímenes odiosos y crimínales. El comunismo ha estado en muchos combates de liberación pero es reacio a gestionar bien sus eventuales victorias. Hoy es un residuo propio de sociedades tercermundistas que bebe en las mismas fuentes que el nacionalismo allí en donde es poder.
    ¿ Luchar por un ideal , por cualquier ideal , sin revisión , cegados por sus promesas , inmunes a reglas morales civilizadas hasta su victoria ( nuestra opresión ) ?
    No , gracias .

  2. Excelente artículo del senyor_g, intentando indagar en las motiviaciones de los luchadores incansables desde la óptica confusa que nos ofrecen estos tiempos líquidos.

    Quizás cuando se han vivido ciertas cosas y piensas de una determinada manera, es la única posibilidad que te parece lógica.

  3. El tema es muy curioso, seguramente haya que explicarlo con factores que van desde lo psicologico a lo sociologico e histórico. Las identidades en un momento dado se forman, o se conforman, y entonces uno es lo que es. En atención a lo suyo y a lo que hay. Esto cambia mucho, claro. En los cuarenta en Europa hubo partisanos y guerrilleros antifascistas. Menos mal, y gente que estuvo dispuesta a ir a la cárcel por mantener vivos unos ideales que, afortundamente se mantuvieron vivos (Francia e Italia mantienen como elementos fundacionales de sus democracias modernas, exagerado o no, la resistencia antinazi). En los setentas en cambio, en el occidente fetén habia terrorismo, por ejemplo. Por doquier., esa noción del «resistente a ultranza» ya tenia colores más feos. Ahora posiblemente se puede detectar al «de izquierdas» al «de derechas», al «liberal», al «indepe» etc, pero , en nuestro mundo Europeo o norteaericano feten los que están dispuestos a llegar hasta consecuencias terribles son mas bien gente ligada a opticas muy anajeas al terrorismo , es como connota en la realidad.

    Eso sí, en China, Birmania, los países árabes etc, sitios que no nos suenan tanto, quien esta dispuesto a chupar carcel horror y sacrificio siguen siendo mas bien gente con convicciones democraticas -quizas factor religioso aparte.-

    Por otro lado si uno mira los informes de OIT, o de Amnistia internacional, vera que hay dos colectivos que suelen tomar candela bastante: periodistas (siempre contar cosas que incomodan a los poderorsos sale caro) y tb llaman la atencion la cantdiad de sindicalistas que siguen palmando o siendo detenidos a base de bien, posiblemente por razones bastante parecidas a los periodistas.

    Posiblmenet uno hace lo que hace porque siente que no peude hacer otra cosa. No descartaría estar un poco desequilibrado, en el sentido de poner tuproposito vital en algo que no podrás ver, ni tocar, ni controlar, que depende de la voluntad de los demás y de la suerte. Sin embargo, hay que reconocer que si en el occidente fetén ya no hay gente así es porque afortundamente ya no hace falta llegar a esos extremos, posiblemente porque otra gente a lo largo de la historia ya lo hizo, que no es poco.

  4. Para completar la imagen, esa noción del esfuerzo mas alla de uno, de todo, no es privativa de la izquierda , ni tan siquiera de la figura del resistente -un concepto mas amplio-. Vease como por ejemplo los masones, señores tranquilos donde los haya , proclaman sin ir mas lejos estas tareas de largo recorrido
    «Hagamos mejores las vidas de los demás, trabajemos con #alegría y convicción incluso cuando los resultados se nos antojen lejanos o improbables, construyamos en todo momento con genuina #bondad e ilusión.

    Tengamos la seguridad de que todo #esfuerzo honesto valdrá la pena. – en Gran Logia de España»

  5. No el compromiso o el esfuerzo no es privativo de la izquierda, de hecho el padre de Semprún, era un católico comprometido en la defensa de la república.
    De hecho en la izquierda conozco a muchos católicos, y cuando digo a católicos, no quiero decir bautizados, sino implicados en sus entidades. De echo en el libro del Mandarinato culturlal español creo que Gregorio Morán vincula opciones izquierdistas radicales y que optan con la lucha armada con cristianismo .

  6. Como dice Sr.J sobre la opción lógica por lo vivido; no sé si un obrero de hace 100 años que pasa a hambre, que es enviado a guerras que no le van, que ve morir a sus hijos, que ve las desigualdades, que ve que no tiene derecho a voto o que si lo tienen le tongan…. hubiese pensado logicamente en hacerse liberal-democráta….

  7. El efecto de las bombas en una trinchera de la II Guerra Mundial es absolutamente indiferente en el Estado Mayor.
    En la guerra , en los conflictos internacionales , el lenguaje es diferente.
    Es una lógica militar cuyo dueño define la ética de las operaciones.
    Francia fue un desastre militar , antes que nada , por la estupidez de sus mandos.
    La guerra es fundamentalmente la negación del derecho.
    En Francia se produjeron cerca de 60.000 violaciones por los GI en los primeros meses de la invasion.
    La colaboración fue masiva y militarmente ( lo que importa ) importante.
    Fabricaron aviones -unos 1600 – para matar antifascistas.
    El fenómeno es más complejo por ser más humano. La gente tiene miedo y razón para su miedo.
    ¿ Hicimos las paces ?

  8. Paz para nuestra España amable , para la que nos encontramos en la deriva del camino , para la que a nadie hace daño , y para que de todos espera amparo.
    Espańa en el corazón , amigos

  9. A los que queremos a España no nos mueve la identidad que fija origenes de los que el tiempo nos aleja. Es nuestro entorno e historia inmediata lo que nos acogue. Somos y dispuestos a invadir la tierra con el amor de nuestra mirada .Voz , ante que acto , mirada antes que voluntad.
    Pasarán las nubes y los rayos aquí en donde estamos , más nuestra alma permanecerá dura ,,en estas tierras extrañas que la fuerza ciega de estos momentos huecos derrumbarán.

  10. Me ha emocionado el artículo de hoy. Siempre me emociona el recuerdo de los republicanos españoles en su lucha contra el fascismo.

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