Doscientos catorce años después

Verónica Ugarte

“La medida de nuestro odio es idéntica a la medida de nuestro amor. ¿Pero no son éstas sino maneras de nombrar una pasión?”. Carlos Fuentes, “El Espejo Enterrado”.

“Si tu mueves ficha, yo muevo ficha”, palabras de José Maria Aznar refiriéndose a una supuesta charla que habría mantenido con Fidel Castro al llegar el español por primera vez a la Moncloa. Quiso apuntar alto y empezar a seguir una línea dura contra el gobierno de Cuba. Quiso que España entrara en los altos círculos de la política exterior, donde las potencias tienen un poder político y económico que les permite la injerencia en asuntos internos de los países que alguna vez fueron sus colonias.

Casi a finales de su mandato, Felipe González concedió una entrevista al diario mexicano “Reforma” donde afirmó con contundencia que el entonces presidente mexicano Carlos Salinas de Gortari era el mejor presidente que había tenido México. Las reacciones contra esta declaración, no solo percibida como absurda por la oposición, y como fuera de lugar al tratarse de un asunto mexicano, pusieron en la picota a González ante varios segmentos políticos y sociales en el país norteamericano. Simple: no gusta que nadie hable de asuntos internos y para ello se tiene una gran sensibilidad. Y la Doctrina Estrada, fruto de los golpes diplomáticos recibidos a partir de la independencia: “México no reconoce o desconoce gobiernos. México establece relaciones diplomáticas”. Sigue leyendo

Desestabilizando Venezuela

Carlos Hidalgo

El “dóberman” del régimen chavista, Diosdado Cabello, ha aparecido en todos los medios de su país, presumiendo de haber detenido a dos ciudadanos españoles, a los que acusa de ser agentes del CNI (el Centro Nacional de Inteligencia, uno de nuestros servicios secretos) que habrían estado planeando, junto con la parte más radical de la oposición y la CIA (por supuesto, siempre se tiene que mencionar a la CIA), iniciar un levantamiento armado con la intención de derrocar al actual gobierno venezolano.

Por supuesto, el Gobierno de España se ha apresurado a negar semejantes acusaciones y en este momento está tratando de identificar a los ciudadanos detenidos, de asegurarse de que efectivamente sean españoles y, además negando cualquier tipo de plan u operación de nuestros servicios de inteligencia para derrocar al gobierno liderado por Nicolás Maduro. Sigue leyendo

En el adiós (o hasta luego) de Ada Colau

Alfons Salmerón

Esta semana hemos asistido al adiós de Ada Colau. Su despedida del Ayuntamiento de Barcelona y de la coordinación de Catalunya en Comú es todo un símbolo del fin de un ciclo que empezó en 2015 y se cerró en las pasadas elecciones municipales. El ciclo de la llamada nueva política que se fraguó en las plazas en el 2011 como respuesta a la crisis del 2008, que cristalizaría con la creación de Podemos en las europeas del año anterior y que en Barcelona ciudad tuvo una expresión muy particular en la formación Barcelona en Comú, cuya base fundamental fue el movimiento contra los lanzamientos hipotecarios que en aquellas fechas proliferaban en toda España, bajo las siglas de la PAH (Plataforma de Afectados por la Hipoteca), de quien la ex alcaldesa de Barcelona fue su portavoz.

El fulgurante ascenso y caída de la nueva política y del espacio que representa Ada Colau es digno de estudio. Todo lo que ha ocurrido en la historia política de nuestro país en tan solo nueve años podría explicarse a partir de la irrupción de ese espacio político que conquistó alcaldías importantes en aquel verano de 2015 con Madrid y Barcelona a la cabeza pero también Valencia o Zaragoza. Sigue leyendo

De la potencia

Juanjo Cáceres

Palabras claves: futbol, España, Cataluña, xenofobia

Aristóteles y sus seguidores reflexionaron abundantemente sobre la potencia, es decir, sobre la posibilidad de ser algo diferente de lo que un ser es. Ciertamente resulta propio del ser humano el querer ser algo distinto y el pensar que puede serlo, lo que le invita a explorar o intentar nuevas posibilidades y también a preocuparse cuando lo que se le viene encima solo puede ser peor. La cultura popular refleja esto último mediante la célebre frase “virgencita, que me quede como estoy”.

La potencia es individual pero también podemos mirarla en lo colectivo. Precisamente, por su voluntad de ser y sus grandes potencialidades, España ha alcanzado varios hitos: al menos, en el terreno futbolístico. Su combinado español masculino se ha proclamado este mismo año campeón de la Eurocopa y medalla de oro en los juegos olímpicos. Lo logró, además, con la participación de una singular combinación de jugadores procedentes de clubes de territorios periféricos, los cuales adquirieron un enorme protagonismo. Por su parte, el Real Madrid se alzó una vez más con el principal título continental del mundo, la Liga de Campeones. Últimamente, en Barcelona, el electrizante inicio de su principal club en la nueva temporada liguera, está mostrando una vez más que en esa ciudad se encuentra el mejor centro de preparación de jugadores de elite, no solo de Europa, sino del mundo. No nos olvidemos tampoco del futbol femenino, pues España es la vigente campeona del mundo (en este caso, 2023) y el FC Barcelona el vigente ganador de la Liga de Campeonas (2024). Sigue leyendo

Tirar los dados

Julio Embid

Como he contado alguna vez en esta casa, servidor de ustedes es de Zaragoza y jugador de juegos de mesa. Me encanta quedar con mi cuadrilla de cuarentones, generalmente en mi casa, con una cafetera a rebosar y alguna rosquilla o patatas para merendar y echar una partida. Si puede ser una tarde a la semana, si el trabajo o los hijos lo permiten. Últimamente estamos jugando a Descent que es un juego de miniaturas y aventuras estilo “Dragones y Mazmorras” donde mis amigos llevan una druida y una guerrera elfa y yo llevo los malos y les intento poner trampas. Lo cierto es que aparte de pasar un buen rato y una buena conversación de cualquier tema, ponemos la mente en movimiento e intentamos ganar la partida afilando la cuchilla.

Una vez al año en Zaragoza, desde hacía ocho, se realizaba un evento llamado “La Noche Insomne” donde para la juventud (y los no tan jóvenes que en este asunto creo que seremos mayoría) se abría durante doce horas toda la noche la Sala Multiusos del Auditorio de Zaragoza para jugar a juegos de mesa de manera gratuita. El Excelentísimo Ayuntamiento de la Inmortal Ciudad de Zaragoza sólo tenía que abrir la puerta y encender la luz y la organización (varios clubes de juegos de mesa) se encargaban de todo lo demás. Sigue leyendo

Una Catalunya posible

Senyor G

Saturado de que hubiese habido otras elecciones, sinceramente me alegro por que por fin se haya constituido el gobierno de la Generalitat de Catalunya. Que un perico del PSC como Salvador Illa sea el presidente de la Generalitat y que lo haga con el apoyo de ERC y Comuns… No se lo podría razonar demasiado, es una sensación, la fuerza de un sentimiento si me permiten la broma. Les vuelvo a repetir en otro post más que tengo cierta saturación de tantas informaciones, dimes y diretes, que me hacen mirar la política con cierta distancia, pero aquí sigo porque me da que la intención es que nos vayamos separando de ella, y por ahí no podemos pasar.

Saturado de procés. Esa podía ser una motivación para la alegría, entre racional y emocional para celebrar que Illa por fin sea el elegido. Pero ahora también saturado de la reacción a la propuesta principal de acuerdo que ha permitido la presidencia de Salvador Illa que es el pacto de financiación acordado entre PSC y ERC, y que ahora requerirá de acuerdos más amplios a nivel de España. Los votos son los que son y las mayorías para cambios precarias, muy precarias. Saturado de igualdistas, de esos que solo hablan de igualdad si es porque algo les puede sonar a interés de Catalunya. No querían autonomía, y la cogieron, no querían más competencias y las cogieron,  no querían más financiación para las autonomías, y la cogieron. Además los cercanos, que no les escuchas hablando de igualdad para hablar de la monarquía o de más derechos laborales o sociales, o de clases sociales. Ese Page para que sinosequé de Catalunya. Que me parece que sí, pero a vez si alguna vez reman a favor y no sólo por la brújula que al final parece que somos Catalunya. ¿Los rojiigualdistas les pegaría bien? Así hasta nos pueden confundir con cierta cosa roja. Sigue leyendo

Cosas de mi pueblo

Carlos Hidalgo

Aunque llevo viviendo en Madrid desde los 18 años, soy de Talavera de la Reina, en la provincia de Toledo. Talavera, que hace unos 15 años era la segunda ciudad en población de Castilla-La Mancha, es ahora la cuarta, entre Toledo y Ciudad Real. También es la cuarta ciudad con más paro de España y la segunda, si no contamos Andalucía.

Por una acumulación de factores, la crisis de 2008 pegó especialmente fuerte en la ciudad castellanomanchega, tan fuerte que alcanzó una tasa de paro superiores al 40%, que en un plazo de 10 años consiguió rebajarla al 25%, con unos 8.000 parados menos. También da la casualidad de que en esos 10 años la ciudad ha perdido unos 8.000 habitantes. Sigue leyendo

Mirando a Venezuela

Carlos Hidalgo

Mientras escribo estas líneas Venezuela está formalmente llamada a las urnas. Y digo formalmente porque el régimen ha hecho imposible a sus más de ocho millones de ciudadanos en el extranjero ejercer su derecho al voto.

Que ocho millones de personas hayan tenido que abandonar su país, con unos índices intolerables de inseguridad, corrupción u pobreza, ya debería darnos algo en lo que pensar. Y que el régimen gobernante no les permita votar, es otro elemento para la reflexión.

De momento las encuestas señalan que las fuerzas de oposición podrían ganar y por bastante margen. Pero para que esos resultados se puedan materializar, hace falta que la gente pueda votar y que vote. Y aunque el país ha escogido con lupa a los observadores electorales, no parece claro que la mayoría de estos vayan a ignorar irregularidades si se producen. Sigue leyendo

Unas gotas de bitter en el aniversario

Arthur Mulligan

Un gobierno lánguido para un país exhausto. Después de un año este es el triste resumen de la acción de un gobierno débil que con el rechazo de la reforma de la ley de extranjería y los objetivos de déficit (el techo de gasto) -además de dos enmiendas en el Senado a la ley de paridad que prosperaron con el voto del PSOE en contra-, Sánchez suma 33 derrotas parlamentarias poniendo de manifiesto que la geometría variable de la que tanto hizo gala en anterior legislatura no sirve en esta, al estar secuestrada por el chantaje permanente de sus peligrosas amistades cuya relación se asemeja a la que existe entre deudores y acreedores. En este tipo de votaciones, el Presidente acostumbra a no estar presente en el hemiciclo porque no soporta perder con el rostro desencajado por la impostura.

El 29 de febrero el pleno del Congreso reprobaba, con la abstención de Podemos y Junts, al ministro del interior Fernando Grande Marlaska por la muerte de dos guardias civiles en el puerto de Barbate arrollados por una narco lancha. Dos semanas después, la oposición ganó la primera votación del llamado caso Koldo sobre una moción del PP en la que se exigía al gobierno la depuración de responsabilidades además de auditorías y documentación sobre contratos de la pandemia. En este caso la moción salía adelante por la abstención de ERC y Junts, que dejaron tirados al frente del no liderado por el PSOE y Sumar. Este revés fue de los más importantes al tratarse de un asunto de corrupción con el que la oposición está acorralando al gobierno.

En abril, una nueva derrota. Pese al voto del PSOE en contra, una iniciativa del principal partido de la oposición, el PP, exigiendo la deflación del IRPF para compensar la subida de la inflación salió adelante gracias a la abstención de Junts, PNV y BNG. Días más tarde, el 23 de abril, PSOE y Sumar se quedaron solos en la toma en consideración de una proposición de ley del PP para relajar la protección al lobo ibérico. En esta ocasión los de Feijóo consiguieron sumar a Vox, Junts y PNV, que votaron a favor mientras que Bildu se decantó por la abstención. Sigue leyendo

De la transparencia

Juanjo Cáceres

Dicen algunas voces que la mejor transparencia es la que no es intencionada. O, dicho de otro modo, la mejor transparencia es la involuntaria, aquella que se produce pese a la voluntad de no ser transparentes.

En mi opinión, los compromisos públicos con la transparencia deben ser elogiados. Cuanto mayores obligaciones de transparencia existen, más vías hay de conocer el trabajo que realizan nuestras administraciones, de explorar los detalles sobre procesos en curso o de acceder a procedimientos de reclamación y denuncia. En la mayoría de los casos su implementación no responde a la voluntad del poder político que pone en marcha los mecanismos de transparencia, sino a disposiciones de ámbito superior que obligan a adoptarlos. Ello tiene como resultado que, muchas veces, su operatividad, eficacia y utilidad se sitúen a veces por debajo de lo necesario. Pero la transparencia no depende tan solo de la voluntad de ser transparentes. Por eso existen profesiones, como el periodismo, que entre sus principales atribuciones se encuentra, no solo el narrar lo que sucede para que se entere todo el mundo, sino también hablar de aquello que permanece oculto por voluntad de sus protagonistas.

Puede ocurrir a veces, en el ámbito particular, que seamos invitados a ser un poco menos transparentes. Si de repente nos convertimos en protagonistas de una riña, que exhibimos ante terceros, es probable que alguno de sus espectadores nos anime a resolver la disputa en privado y a no seguir montando una escena. Lo cierto es que las situaciones agresivas, aunque las protagonicen otros, nos violentan, y al vernos afectados y al generarnos esa desagradable sensación, preferimos apartarnos o apartarlas de nuestra mirada. Sigue leyendo