El oficio del cocinero

Julio Embid

Cada oficio tiene un lenguaje propio. Una jerga que solo entienden los duchos en la materia. Los agricultores hablan de labrar, regar, podar, esclarecer, sulfatar. Los abogados saben de incoar, elevar, recurrir, apelar, eximir o desacatar. Los informáticos entienden que son un archie, bootear, un kernel, un plug-in o si es mejor un shareware o un software. En la cocina se fríe, se asa, se reboza, se empana y se salpimenta, pero también se piensa.

La cocina no está reñida con el sentido común. Anda corriendo por las redes sociales de internet el video donde el presentador de Antena 3 y famoso cocinero Karlos Arguiñano (Beasáin, 1948) reflexionaba el pasado 24 de mayo sobre el presente y el futuro de España mientras pica y fríe unas zanahorias con guisantes. Este corte de video lleva en youtube más de un millón de visitas y a la gente le llega. Llega mucho mejor que los tertulianos profesionales y todólogos, porque Arguiñano es de casa, de confianza y lleva más de veinte años entrando cada día en nuestras casas mientras cuenta chistes malos, fríe, asa y reboza.

En este video la reflexión acusa de gangsters a los banqueros (o mejor dicho bankeros con k de kilo de harina) e invita a los jóvenes a buscar trabajo fuera de España, mientras dice lo que todos pensamos, que si Rajoy hubiera dicho en otoño que iba a hacer cuando gobernase lo mismo no hubiera sacado los resultados que sacó en las elecciones generales de noviembre.

La reflexión que me surge de este vídeo es que en política, cualquiera puede meter baza, y no centrarnos solo en los profesionales, politólogos y sociólogos, mientras que yo como politólogo tengo serias dificultades en hablar de piedras calizas, arte micénico o pesca con sedal, de las cuales, honestamente, no tengo ni puñetera idea.

De cocina mi arte se reduce al arroz blandito y a abrir los bricks de salmorejo del Mercadona y servirlos en un plato hondo, parte esencial de mi dieta en esta época. Pero de Ciencia Política y Análisis algo debería saber, o al menos tengo un papel firmado por el suegro de Urdangarín, con un cisne, que dice que algo debería saber. Sin embargo cada vez estoy más convencido de la necesidad de simplificar el lenguaje (y n m refiero a comernos vocales, como si fueran rosquillas del Santo). Creo que todos: políticos, politólogos y politonos, deberían saber comunicar como lo hace Arguiñano, y decirnos quién es el culpable de la crisis y cómo y cuándo se puede salir de esta. Sin embargo, si tenemos que esperar a que Rajoy sea quien de las explicaciones, vamos a terminar más hartos, que Tarragona de pescado.

19 comentarios en “El oficio del cocinero

  1. Buenos días!! Gracias por su artículo Julio!
    Está claro que Rajoy nunca va a dar explicaciones, porque no puede, porque entonces se tendrían que ir todos a casa, empezando por Rato que ya se ha ido con unas perrillas de ná…. Qué tiene este tío que se llama Rato que parece intocable (como la casta más baja en la India, ojala fuera él la casta más baja, aunque moralmente ya lo es….) Lo que dice Arguiñano lo decimos muchos, sobre todo en este blog, menos mal que a él se le escucha con más ganas.
    Qué pasa con Rubalcaba? le han dicho que lo está haciendo mal también?? menos mal!!

    Aunque parece que la sociedad va hacia atrás, gracias a las nuevas tecnologías la gente recibe mucha información, y por tanto el sentido común va cogiendo fuerza, pero sigue sin ganar elecciones porque está dividido. No hace falta ser político o politocólogo para saber pensar (….) Eso lleva a la idea generalizada en el pasado de que los políticos eran seres superiores, puro clasismo. Ahora la ciudadanía se va dando cuenta de que como trabajadores son ineficaces y además tienen mala fe, pero ahí siguen, sin que les afecten las reformas laborales!!

    Saludos!

  2. un shareware o un software.

    WTF!!!

    Caramba! si lo he entendido bien se trata de un problema de comunicación (otra vez nooo!!!)
    Pero si, si hay un problema de comunicación. Mientras tenemos un agujero impresionante en la banca española, mientras tenemos más 50.000 millones malversados en el AVE aquí se discute sobre los coches oficiales.

    Mientras el estado suma una deuda tres veces superior al conjunto de las autonomías aquí criticamoss que las del PP no cumplen el objetivo fijado por el estado. O los gastos de doblajes de nosequepelis.

    Quiere un culpable? rápido y claro: PPSOE. Y las élites de la transición que nos gobiernan desde hace 30 años. Si a esto quiere ponerle una cara tiene la de los sellos.

    A silbar, a silbar (pero flojitoooo que no se enteren los mercados, eh?)

  3. Anoche vi un rato Intereconomía, en algún sitio vi anunciado que iban a hablar de los despidos a mujeres en España por quedarse embarazadas….. como no me entero nunca con la tele pues cuando lo puse ya no hablaban de embarazadas. Pero desde aquí doy mi respuesta: despiden a quien pueden, y si tienen excusa mejor. Y preguntar estas cosas sólo indica que no saben lo que pasa en su propio país…. ¿o era una pregunta al tún tún?

    Pero no sé si por fortuna o por desgracia llegué justo para oir a Edurne hablar. Edurne, bonita, mezclaste conceptos con muy mala fe. Sociedad civil, empresarios y clase política son 3 grupos sociales por separado. Con tu intención de defender a los bancos, algo indefendible, no sé qué te lleva a hacerlo, dijiste que la sociedad civil era culpable porque debía mucho dinero a los bancos. ¿¿Cómo??

    A ver, la sociedad civil lo que habrá dejado de pagar son las hipotecas porque esas personas se han quedado sin trabajo (debido a este Capitalismo indefendible también), y además de quedarse sin trabajo, el banco no sólo les quita la casa sino que les exige seguir pagando la hipoteca. Esa es la deuda de la sociedad civil.

    Y los empresarios, que son a los que tú te referías, son los que le deben al banco los millones de euros. Y la gran mayoría de estos empresarios tienen intereses políticos.

    Defender a los bancos echando la culpa a la sociedad civil… no hay por dónde cogerlo…. Y es de muy mala fe. Por supuesto hay que investigarlo hasta el final y que devuelvan todo el dinero. Y alguien tendrá que ir a la cárcel, los de guante blanco también!! 🙂

    Y para más inri el Caixa Galicia ahora Caixa Nova es mi banco. En una ocasión hace 2 ó 3 años me llamaron para ofrecerme 9mil euros, me molestó tanto que me llamaran a mi casa para ofrecerme dinero que les dije que no me volvieran a llamar en su piiiii vida para nada. No lo han vuelto a hacer. Menos mal (por ellos).

    Saludos!

  4. Yo decía el otro día que la cosa estaba fatal visto que en este DC uno escribía desde el exilio, otro anhelaba el retiro entre lechugas, un tercero se veía rodeado de golfos, otro suspiraba, etc… Hoy me ratifico: Embid se alimenta a base de salmorejo de brick, Pratxanda lanza siglas extrañas a la red mientras desvela quíén es el malo de la película y Sarah dice que pensar no es sólo cosa de «politocólogos» (¡ esos qué van a pensar, si estarán liados atendiendo partos simultáneos !),…
    ¡En fin, un sinvivir! Yo también me retiro….a achicharrarme al sol.
    Que junio les sea leve.

  5. Barañaín, te vas de vacaciones un mes entero?? qué privilegiado… jejejeje Vuelve eh!!

  6. ¡Ajá! Ahora me explico lo de los «politocólogos» de Sarah:

    «Anoche vi un rato Intereconomía, en algún sitio vi anunciado que iban a hablar de los despidos a mujeres en España por quedarse embarazadas… »

    Como si no fuera suficiente con castigarse viendo Intereconomía, encima se queda con las ganas de enterarse de algo que tiene que ver con embarazadas en peligro y a cambio aguanta un rato a Edurne (¿Uriarte?, ¡Virgen del Tremedal!). Lo cierto es que con Edurne Uriarte – si es que de ella se trataba-, no casa nada bien lo de «politocóloga» (además igual se mosqueaba el ministro Wert, pues sólo le falta ponerse a procrear a su edad y con la que está cayendo) .

    ¡Y Rajoy sin dimitir!

  7. ¡Hola amigos!.
    Y si Ziluminatius estuviera preparado un programa de cocina,se llamaria «La Cocina del Infierno»
    ….¿verdad?….JAJAJA…que nervios.

  8. Barañaín, era una mujer a la que llamaban Edurne….. imagino que Uriarte claro…. jejeje Con sus comentarios de ayer (e imagino que siempre) no casa ni politocóloga ni sentido-común.

    Intereconomía en mi tele está como canal internacional, al lado de la BBC, qué nivel!! Para verlo (cuando eso) con ojos de extranjera.

  9. A este país le faltan los consejos del gran Teoura . Desde que «desapareció» Teoura hasta Arguiñano nos parece un buen cocinero. Desolador. El único rescate que necesita España es que vuelva Teoura.

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  10. Los programas de cocina ya no son como los de antes…
    Las conversaciones de patio,tampoco…¿o deberia decir «tambien»?.
    Bueno ,a veces el idioma terraqueo se me resiste,asi que un video vale mas que mil palabras….y si no vean,vean…
    http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=09YSNOsVebM

    Zapatero fue un adelantado a su tiempo. Nos informó de cuál iba a ser la clave de nuestro futuro. En marzo de 2011 se reunió con la élite de la banca y el empresariado y les dijo: «El diferencial con Alemania es un marcapasos que sigo día a día; si baja voy bien, si sube tengo problemas». El entonces presidente del Gobierno informó de que su corazón latía al ritmo de la prima de riesgo española y todo el mundo se burló de él. Era cuando el PP decía que la prima de riesgo se llamaba Zapatero.
    http://www.elmundo.es/blogs/elmundo/sombrapoder/2012/05/31/zapatero-nos-dejo-su-marcapasos.html

  11. Y a todo eso, Divar sin dimitir… Menudo morro
    le echó en la rueda de prensa de ayer… No tenía desperdicio. Sobre todo, lo de que no dimite porque eso sería admitir que ha hecho algo mal…

    Ýo de momento no me voy ni de vacaciones, ni al exilio, pero al menos me quedará el fin de semana…

    Por cierto Sarah, menuda moral la tuya, viéndote Intereconomía… Vale que a veces hay que escuchar a los «otros»; pero aún así, hay que echarle valor.

  12. jajaja sabía que levantaría ampollas….. sólo fue un rato y no me arrepiento!! 🙂 luego volví a poner Historias de Filadelfia y me quedé dormida. Aunque es muy triste tener que oir lo que dice gente como Edurne, es muy fuerte. Echar la culpa de los millones de euros perdidos por los bancos (y ganados por los bolsillos de los ratos) a la sociedad civil. Es que…. ¿cómo puede decir alguien eso y que no le caiga un rayo?

    Tengo que aclarar que cuando me llamó Caixa Galicia yo tenía pasta en el banco, y según me hablaba el chico, que recuerdo perfectamente quien es (estuvo poco tiempo en la sucursal) yo pensaba, ¿son tontos o se lo hacen? Y luego fue cuando salté.

    Si puedo servir de testigo lo hago de gratix!!

  13. Seis meses después de la llegada de Mariano, la discusión en España es : a) si nos intervienen, y cómo; b) si salimos del euro, y cómo.

    Glorioso, sin duda.

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    Lo único bueno que tienen los eternos circunloquios de Montoro es que a veces sueltan alguna perla. Si nos intervienen, ha venido a decir, que se olviden de cobrar. ¡¡¡Oído cocina!!!

  14. Pero ¿de dónde habrá salido aquella idea de que estos tíos eran listos e iban a ser capaces de sacar a España de la crisis? Y la gente lo creyó. Pero si se repasa su historia, la realidad es que solo han gobernado 8 años desde que tenemos democracia. Cogieron la economía en la rampa de salida en el 96 y se adjudicaron «el milagro español», cuando en realidad lo que hicieron fue poner las bases para la maldita burbuja esta de cuyos lodos estamos viviendo. Acuérdense de sus actuaciones cada vez que se les presentó una situación difícil: el humdimiento del Prestige, el Yak 42, el once 11. En todos esos casos entraron en pánico y la cagaron. ¿Se imaginan a estos tipos resolviendo la huelga de controladores aéreos? Yo no quiero ni pensarlo. Y luego robaron, robaron mucho. (Sí, Fernando, ya sé lo de los ERES andaulces, y lo de Roldán y lo de los fondos reservados). Pero estos señores robaron mucho, pero mucho, mucho. En Valencia, y en Baleares, y en Madrid….
    ¿De dónde les venía entonces esta buena fama?

  15. También voy a poner una descripción certera:

    La gran ESTAFA.

    El neoliberalismo, el dogmatismo económico con el que, sin ir más lejos, se corre (intelectualmente) la condesa Esperanza Aguirrre. sin duda, constituye una colosal estafa hacer creer que esas ideas, prefabricadas para servir los intereses de unos pocos a base de sangrar a la mayoría, no solo resultan beneficiosa para la Humanidad, sino que brilla como la única alternativa. Recordemos a Margaret Thatcher (de afición, sus cogorzas) acuñando al respecto la expresión “Tina” (There is not alternative)

    Pensemos que el neoliberalismo parte de la noción fundamentalista de que los mercados asignan los recursos con eficiencia, sirven al interés público y se corrigen por sí mismos. Esto último con la inefable “mano invisible” que, como tal, nadie ha visto aún.

    Defender lo anterior, con la que está cayendo, es menos racional que la existencia del “ratoncito Pérez” o la “bruja Piruja” e, indudablemente, resulta increíble encontrar ventajas al “libre mercado” en la “asignación de recursos” referido al tema de la vivienda, el empleo, la educación, etc. Al menos para la mayoría de la población.

    Así, en el tabernáculo de las romerías neoliberales, EEUU, millones de personas honradas y trabajadoras no podrán pagar su vivienda. Otros millones, habiéndose endeudado con más prudencia, contemplan cómo el valor de sus casas desciende al nivel de la peor de sus pesadillas.

    Y todo ello se debe al descontrol financiero, al empequeñecimiento de lo público a favor de los intereses privados, que arruina a la mayoría a la par que barniza de oro a una minoría codiciosa y psicopática.

    Desgraciadamente, la metástasis del engañabobos neoliberal asfixia a los más débiles. De este modo, los países en vías de desarrollo que han seguido políticas neoliberales no solo han salido despedidos de la noria del crecimiento sostenido y el desarrollo, sino que cuando crecieron, los beneficios acabaron en las abultadas cuentas corrientes de las clases altas y, en su mayor parte, fuera de aquellas naciones.

    Doble lenguaje e idiotez generalizada.

    Cuando escuchamos a la inmunda grey de los prostitutos intelectuales, podemos percatarnos de que la retórica del “libre mercado” habla con dos lenguas: los neocon aplauden las subvenciones y regalos fiscales a las grandes empresas, jalean los créditos a los bancos y se apuntan a contratos millonarios con la Administración… pero se retuercen de bilis cuando la intervención pública se dirige a sectores desvalidos.

    Por supuesto, toda esta hez neoliberal, empezando por la condesa Aguirre, acabaría vendiendo pañuelos en los semáforos si se aplicaran a sí mismos los principios que niegan a los más débiles.

    Y lo más dramático no es que el mundo esté repleto de infames codiciosos o pajilleros intelectuales a su servicio, lo trágico es que millones de personas permanezcan ciegas ante este montaje, idiotizados por el fútbol, la telebasura y una manipulación mediática tan evidente que uno no acierta a comprender cómo alguien se la traga.

    Las sabias palabras de un Premio Nobel.

    Este engañabobos neocon ha resultado especialmente funesto en países pobres. Se les obligó a cesar la intervención en agricultura, con lo cual quedaron inermes ante la descomunal competencia de Europa y EEUU donde ese sector “curiosamente” prospera al abrigo del Estado.

    Así, el problema alimentario se agrava en países pobres. Una vez más, las “recetas neoliberales” han provocado efectos secundarios: millones de personas no podrán costearse los nutrientes básicos. Morirán de inanición y padecimientos derivados. Un genocidio silencioso que convierte al capitalismo sin controles (es decir, el neoliberalismo) en el gran asesino del siglo.

    Debemos, por consiguiente, meditar las palabras del Premio Nobel de Economía, Joseph E. Stiglitz: “El neoliberalismo siempre ha sido una doctrina política que sirve a determinados intereses. Nunca ha estado respaldado por la teoría económica. Y, como debería haber quedado claro, tampoco está respaldado por la experiencia histórica”.

    Entiendo que si trasladamos estas palabras a un lenguaje coloquial solo podríamos concluir: el neoliberalismo es un engañabobos, el gran engañabobos del pasado siglo XX y de lo que llevamos del XXI.

    En España tenemos en estos momentos un ejemplo valioso de la gran estafa neoliberal: BANKIA (hay otros muchos), pero este sea acaso el más excepcional, y fácil de ver y entender por cualquier cociente intelectual.

  16. No me ha entendido usted Fernando, al colgarme esa noticia del ABC, Repudio el escándalo de los ERES de Andalucía tanto como usted; probablemente más que usted, porque a mí me indignan más los atracos de los míos que los de los otros. Como supongo que le pasa a todo el mundo. Pero creo que reconocerá, aunque no sirva en absoluto de justificación, que lo del PP en los últimos años no tiene parangón con nada conocido.

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