Por unas elecciones con relevancia propia

Juanjo Cáceres

Ya queda tan solo un mes para la celebración de las elecciones municipales y autonómicas en España y los grandes partidos nacionales se encuentran empeñados en convertir las mismas en una primera vuelta de las elecciones generales que tendrán lugar a final de año. Flaco favor hacemos a los municipios y comunidades autónomas de nuestro país asociando las batallas nacionales a unos comicios donde deberían primar los balances de las políticas locales llevadas a cabo durante los últimos cuatro años y los análisis sobre cómo afrontar los siguientes.

Caben pocas dudas de que España es un país considerablemente descentralizado y de que cede a las comunidades autónomas amplias competencias en una gran diversidad de materias. De ahí que, a pesar al innegable peso de la administración del Estado, dispongan de amplias oportunidades para desarrollar políticas propias y de seguir cada una su propio itinerario. También las corporaciones locales, peses a sus insuficiencias endémicas en lo que a financiación se refiere y a su dependencia en muchos aspectos de administraciones de ámbito superior, tienen un papel crucial en nuestras vidas. De ahí que debiera ser posible evaluar la labor realizada por los gobiernos municipales de manera independiente a la marca política que tengan y a lo que ocurra en el Pleno del Congreso o del Senado.

Pero el empeño de los partidos va en la dirección contraria. Es demasiado tentador convertir por ejemplo las elecciones de la Comunidad Valenciana en uno de los principales campos de batalla en clave nacional, pese a que la experiencia de gobierno valenciano bien merece analizarse con lupa, porque en algunas materias muy relevantes han ido mucho más lejos que otras administraciones que presumen mucho de la importancia de su autogobierno y luego rinden mucho menos. También lo es aplicar coordenadas nacionales a comunidades autónomas con grandes extensiones de España vaciada, llámense Castilla, Aragón o Extremadura, porque las respuestas políticas para abordar los problemas endémicos de esas regiones brillan por su inexistencia o ineficacia, y encima, periódicamente se ven envueltas en jolgorios políticos construidos en el centro del Estado, tal y como sucedió con las macrogranjas y el chuletón imbatible hace un par de años.

Las semanas previas a la convocatoria de elecciones y las primeras de la precampaña han sido ricas también en apadrinamientos, es decir, en sesiones de presentación de candidatos de la franquicia en pueblos, ciudades y comunidades autónomas. Porque realmente los partidos en su conjunto operan en las elecciones territoriales como si gestionasen una franquicia. Una gran parte de los mismos son promovidos desde las sedes centrales de los partidos y presentados por sus líderes de partido ante su propia comunidad. Es una ceremonia tan frecuente que no se nos hace extraña pero, ¿ustedes su imaginan a Pedro Sánchez personándose en una reunión de una comunidad de vecinos para promover a un candidato a presidente de la comunidad de propietarios, como si la comunidad no pudiera generar sus propios liderazgos de manera eficiente? Pues lo que no sucede a escala de comunidad de viviendas, sucede constantemente a escala municipal: gentes venidas de fuera bendiciendo aquí y allá personas para gestionar la administración autonómica o la local. Con la noble excepción, obviamente, de las agrupaciones de electores y de los partidos verdaderamente municipalistas.

En un paso adelante en esta tendencia, se están produciendo en los últimos tiempos saltos en paracaídas directamente desde la sede del Congreso a las candidaturas a ayuntamientos relevantes. Quizás el caso más conocido es el de Gabriel Rufián, que ejercerá de cabeza de lista en Santa Coloma de Gramanet, pero no ni muchísimo menos el único caso y los que más lo critican, son los que más tienen que callar. Por lo general los partidos venden como un valor añadido el salto desde la política nacional a la política local, pero la realidad es mucho más tétrica: en muchos casos no deja de ser una manera de retirar discretamente a diputados y diputadas de los grupos parlamentarios, con la falta de motivación que ello conlleva para el depuesto y la falta de actitud que comporta para afrontar la exigente labor de ejercer de concejal en un municipio. Mucho más exigente, ciertamente, que ir a la capital de España a sentarse en el hemiciclo.

Y finalmente no puede negarse tampoco la poca disposición de los medios de comunicación nacionales a dar relevancia propia a estos procesos electorales. Unos medios donde solo se muestra una y otra vez el runrún por el futuro de la alcaldía de grandes ciudades, en particular de Madrid y Barcelona. En los que no se hace balance conjunto alguno de cuatro años de políticas municipales en poblaciones grandes o de tamaño medio en ningún área relevante. ¿Ustedes saben si podemos tomar alguna ciudad española como ejemplo en materias tan relevantes como atenuar el impacto del cambio climático? Puede que alguno diga que sí, que a alguno le suene la batalla de las supermanzanas en Barcelona y si así fuera también habrá reconocido el signo partidista que la misma tiene, repleta de argumentos tramposos y patadas al tobillo del adversario.

No es un panorama nuevo. El impulso del cambio en lo que a política municipal y autonómica se refiere llega tremendamente agotado desde ese lejano 2015 que mostraba un camino distinto. Los ayuntamientos del cambio se extinguieron mayoritariamente en 2019 y este 2023 nos ha traído situaciones tan pintorescas como los encierros protagonizados por militantes y candidatos de Podemos en Asturias o Fuenlabrada. La voluntad transformadora recae ahora en esas agrupaciones de electores y partidos locales que han ostentado responsabilidades de gobierno o que intentarán cambiar unos gobiernos anquilosados cuya única ambición de futuro para sus municipios es alargar su propio presente.

Y en cuanto al resto, les llega la hora de la verdad. La hora de comprobar si su labor añade valor a su marca, regalándoles unos resultados por encima de la media y de los obtenidos hace cuatro años, o bien ven menguado su número de votos. Lo cierto es que es en la capacidad de superar la tendencia general donde mejor podemos observar las capacidades de un candidato. Y aun así muchos andarán preocupados por su resultado en un contexto electoral incierto, donde la dirección del voto de la gente puede ser menos previsible que otras veces. La ciudadanía dirá.

13 comentarios en “Por unas elecciones con relevancia propia

  1. Tiene razón Cáceres en la importante descentralización de nuestra vida municipal y autonómica con sus posibilidades de mostrar perfiles propios que cuando son de éxito por lo general amplifican sus mandatos .

    Lamenta , de otra parte , la desaparición de un “ impulso de cambio ” a partir del 2019 sin , a mi juicio , explicar las causas de ese desencanto , seguramente porque no cabe en el breve espacio de un artículo .
    Pero lo importante hoy , si acaso mucho más que ayer , es la oportunidad de recontar los votos para conocer exactamente los apoyos que tiene el Gobierno de Sánchez en la actualidad y que según las encuestas puede convertirse en la representación de una coalición de perdedores más tensionada y arisca de lo que se percibe hoy por hoy.

    La enorme torpeza de Sánchez de presentar su plan de vivienda en español en lugar de en un inglés coloquial que pase desapercibido como en un cóctel diplomático, ha revelado al electorado un hecho singular : cero vivienda pública durante la etapa de gobierno que concluye . Ni la intensa Ada Colau es capaz de mejorar su vocación desastrosa .
    Como en el resto de España, la vivienda es el gran factor de desigualdad de la economía española. Y aunque en el alquiler su política ha sido muy nociva obteniendo aumentos significativos ,algo ha hecho de VPO. En 2021, las viviendas nuevas iniciadas sumaban 2.144 unidades en la capital catalana, 736 pisos más que cuando Colau y los suyos desembarcaron en el consistorio.
    A escala del problema muy , muy poco , pero es algo .
    Sin duda le pasará factura , porque a pesar de estas paupérrimas cifras el conjunto de sus políticas alineadas con la temeridad independentista ha contribuido al miserable empobrecimiento que ofrece el escaparate de Cataluña .

  2. Que el ruido nacional ocupa los espacios políticos locales y autonómicos es más que evidente pero al mismo tiempo los votantes también reflejan en las estadísticas que se comportan de una manera u otra de distinta manera según la clase de elecciones que se llevan a cabo.
    Que el PP pretenda convertir estas próximas elecciones en «un plebiscito en contra del sanchismo» tiene la misma o nula relevancia que la pretensión de los independentista .

  3. continuo.
    ….que la pretensión de los independentistas por plesbicitar su fuerza politica para conseguir su independencia cada vez que se enfrentan a unas elecciones.
    A mi lo que más me preocupa de estas elecciones es que los votantes no defiendan sus intereses.

  4. ¿ Y cuales son los intereses por los que muestra tanta preocupación ? Si entre ellos está la vivienda , los jóvenes no votarán a Sánchez porque solo les ayuda con juguetes electrónicos .Si son pensionistas , tienen en su mayoría resuelto el asunto de la vivienda , y les deja sin cuidado las faraónicas obras sin identificar . Si son clase media trabajadora maldita la gracia que les hace el aumento de impuestos . Si son ecologistas les manchan las sedes ( a todos ) a socialistas y populares … Si son autónomos , suben sus cuotas ; si empresarios , nuevos impuestos de beneficios caídos del cielo ; si clase alta y gestores de grandes empresas , les señalan ; si inversores , les amenazan .
    Un poema .

  5. Según Mr Mulligan,los jóvenes se quedarán en casa de sus padres jugando a la PlayStation,los pensionistas se quedarán en casa para que no la «okupen».
    La clase media trabajadora se quedarán en casa haciendo números para que su declaración de Hacienda les salga a devolver..
    Los ecologistas secuestraran una piara de cerdos y los mantendrán limpios .
    Los autónomos no irán a votar porque estarán muy ocupados .
    Los empresarios irán a votar al PP.
    Y los demás estaremos en la mesa controlando que VOX no canten el cara al Sol .
    En fin….JAJAJA…que nervios.

  6. Pues yo en Madrid tengo muy claro que conviene, a mi juicio, a la ciudad y a la ciudadanía, y desde luego me conviene a mí, que sean desalojados el actual alcalde y la actual presidenta. Por sus pésimas políticas locales y su falta de todo. Con Sánchez y sin Sánchez.

  7. Madrid es en productividad , paro , deuda , listas de espera para operarse , [ https://datosmacro.expansion.com/ccaa/comparar/ ] una comunidad cuyos números son mejores que Cataluña , Aragón , y otra CCAA , así que no creo que ocurra lo que dice porque algo así no se consigue faltando de todo , y sin Sánchez aún sería mejor ( ¿ porque es lo que me conviene a mí , alfa y omega de toda discusión política ? ¡ supremo argumento sanchista ! ) Un verdadero estrambote. Son los nervios de Amistad Cívica .

  8. Creo que Mr Mulligan se equivoca con el significado de mi firma.
    Con mi JAJAJA…que nervios .
    Me carcajeo de «vuestros nervios.».
    Los tuyos y los de la carcundia político y mediática.
    Ante mi doy fe.
    AC/DC
    ….JAJAJA…que nervios.

  9. El Gobierno del PP de Ayuso en Madrid es una pirámide con los pies de barro.
    El barro en el que se sustentan sus medidas fiscales a costa de la dignidad y el trabajo de todo lo que son servicios sociales y justicia redistributiva.

  10. Muy melodramático “ …a costa de la dignidad y el trabajo de todo lo que son servicios sociales y justicia redistributiva …”

  11. Tienes razón Mr Mulligan es muy melodramatico.
    Lo de la cúspide piramidal de Ayuso es «yo me lo guiso,yo me lo como» y el peso que eso supone a los que están debajo en el barro, eso es «dramático».
    Pero se me escapa el término que se debe aplicar a un partido político que sube al estrado a una telepredicadora para bendecir a Almeida,Ayuso y a Feijóo.
    Se ve que no tenían suficiente con que El ex-ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz,concediera la más alta condecoración del Cuerpo Nacional de Policía a la Virgen, en concreto a Nuestra Señora María Santísima del Amor.
    Debe de ser porqué La Santa Virgen no admite «sobornos» ,así le va al ex ministro con la justicia ,no lo salva no el abogado del Diablo.
    ….JAJAJA…que nervios.

  12. Si los números de Madrid, la primera potencia autonómica en términos económicos, no fueran mejores que los de las otras, con la excepción de la CAV por el concierto, sería de extrañar. No me vale la comparación. Los números y lo rancio de las políticas que se aplican en Madrid, me llevan a concluir que estaríamos todos mejor como estábamos con Carmena, por ejemplo, y como habríamos estado con Gabilondo.

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