Julio Embid
Como he contado alguna vez en esta casa, servidor de ustedes es de Zaragoza y jugador de juegos de mesa. Me encanta quedar con mi cuadrilla de cuarentones, generalmente en mi casa, con una cafetera a rebosar y alguna rosquilla o patatas para merendar y echar una partida. Si puede ser una tarde a la semana, si el trabajo o los hijos lo permiten. Últimamente estamos jugando a Descent que es un juego de miniaturas y aventuras estilo “Dragones y Mazmorras” donde mis amigos llevan una druida y una guerrera elfa y yo llevo los malos y les intento poner trampas. Lo cierto es que aparte de pasar un buen rato y una buena conversación de cualquier tema, ponemos la mente en movimiento e intentamos ganar la partida afilando la cuchilla.
Una vez al año en Zaragoza, desde hacía ocho, se realizaba un evento llamado “La Noche Insomne” donde para la juventud (y los no tan jóvenes que en este asunto creo que seremos mayoría) se abría durante doce horas toda la noche la Sala Multiusos del Auditorio de Zaragoza para jugar a juegos de mesa de manera gratuita. El Excelentísimo Ayuntamiento de la Inmortal Ciudad de Zaragoza sólo tenía que abrir la puerta y encender la luz y la organización (varios clubes de juegos de mesa) se encargaban de todo lo demás.
El año pasado el Ayuntamiento gobernado por el mismo equipo de Gobierno y la misma alcaldesa, presumió de que en “La Noche Insomne” de 2023 pasaron 5.000 personas. Yo estuve el anterior, el de 2022 que ya volvía a funcionar tras la pandemia y eché una partida de Marvel Crisis Protocol con mi amigo Edu que me dio para el pelo gris. Y también eche otra partida de Battletech a doce jugadores bastante loca. Y siempre estuvo lleno hasta la bandera incluso de madrugada. Hasta las seis permanecía abierto y luego a buscar un sitio para desayunar al amanecer antes de volver a casa.
Pues bien, el Ayuntamiento una semana antes de su realización decide cancelar el evento que tendría lugar este fin de semana. La excusa, problemas con el personal de Casas de Juventud y Área de Juventud que querían manifestarse durante el evento por los recortes del Ayuntamiento. Si un gobierno no realizase nada preventivamente por si hay protestas, no se realizaría nada de nada.
Este no es el primer evento cultural cancelado en Zaragoza. El cierre de los centros Etopía y La Harinera, junto a la cancelación del festival de Música Folk tras 32 ediciones son una gota tras otra en los recortes de todo aquello no monetizable y gratuito. Las ayudas culturales para este año 2024, tanto para profesionales como para entidades no profesionales serán de 500.000 euros, lo que supone un recorte de más del 40% con respecto a las otorgadas en el periodo entre 2021 y 2023 (que eran de 850.000 euros anuales). Es decir, volvieron a las cifras prepandemia. Con una sonrisa.
Vivimos en una ciudad cuyo equipo de gobierno goza organizando “ferias de la hamburguesa” (a 15 euros la unidad, bebida aparte) porque puede cobrar una tasa y porque al final la paga el consumidor. Pero no va a permitir que una noche los chavales (y los cuarentones) queden en el Auditorio a jugar al Carcassonne, al Warhammer o al Catán y tirar los dados sin pagar por pasar por la casilla de salida.
La expulsión de los grupos de rock de las ciudades encuentra su complemento en la reducción del tráfico , la disminución de la contaminación acústica o la severa prohibición de las ruedas sobre las aceras – salvo para usos sanitarios
y breves operaciones de carga y descarga .
En Bilbao fue muy bien recibida la idea de trasladar a un monte cercano el Festival de Rock con servicio de autobuses y sanitarios públicos cuya mayor virtud es la lejanía , la poca intensidad de sus reflejos y la paz ; también, en otro montículo , la acampada de las atracciones de feria a las que se puede llegar en ascensor .
Solo queda un punto muy negro de la herencia recibida en la Semana Grande punto cero: las txoznas , el kalimotxo , y la ocupación de la parte antigua de la ciudad , junto a la Ría , por los habitantes de ultratumba , colonos disecados del siglo XIX , rebeldes con soga en la mano en busca de fascistas , violadores , españoles imperialistas y también de los otros .
Se pasea a la Virgen de Begoña , hoy muy desmejorada , muy sola , y en comitiva cansina .
Huele a churros y a pólvora quemada de un toro de fuego . En medio del espacio festivo llora el Teatro Arriaga rodeado de vallas anti vándalos , vehículos de policía y decenas de números para que prime la seguridad.
Las txoznas han decidido que no pagan impuestos por IVA , se extienden los manteros sindicados y los puestos de comida callejera con bombona industrial y zancocho variado de cocina internacional , así , sin más ni más .
Ya no existe el conflicto. Las agresiones sexuales han disminuido un 13 % . Destacan las banderas palestinas , las ikurriñas , las simplemente rojas , pocas de Ukrania y ninguna española .
Hay una del Consulado de Bilbao en el Ayuntamiento. La decisión de Azkuna de colocar una enseña local doce veces mayor que las de España y Euskadi dice tanto de la personalidad del alcalde como del arraigo de este símbolo de la ciudad. Nadie discute su legitimidad, pero lo cierto es que no existe ningún documento oficial de que un dado rojo sobre fondo blanco represente a la ciudad .
Ah , y no hay tampoco espacio para que la gente en lugar de ir a sus casas a jugar al ajedrez permanezcan en un pabellón municipal hasta las tantas.
Ejem…
Edmundo González abandona Venezuela y pone rumbo a España después de recibir asilo político
El Gobierno español ha aceptado la petición del opositor después de unas conversaciones en las que ha tenido un papel clave el expresidente Zapatero
…
Zasca en la boca biliosa del PP..
¡¡Viva Ziluminatius!!
La bondad farisaica de Zapatero
La continuidad de Pedro Sánchez en la Moncloa tras las elecciones de julio de 2023 sirvió, entre otras muchas cosas, para rehabilitar la memoria de los mandatos presidenciales de José Luis Rodríguez Zapatero.
Obligado en su día a dejar el cargo de presidente del Gobierno con el rabo entre las piernas por la hecatombe electoral que siguió a la económica que él negó hasta el último momento -lo que le supuso la pérdida de toda credibilidad y a la postre el derrumbe en las urnas-, tocaba recuperarlo para que ocupara un lugar en el Olimpo de la política patria.
Zapatero, en esta narrativa, había sido injustamente ridiculizado y sometido a un escarnio impropio que de ninguna manera merecía por su desempeño al frente del gobierno de España. Si la historia ofrecía una oportunidad para resarcirlo, esta no debía desaprovecharse. Y esta llegó con las últimas elecciones generales. Así fue como se construyó, aprovechando la estela de la resiliencia de Pedro Sánchez, la leyenda del expresidente que había sido clave para mantenerlo en la Moncloa. El as en la manga que había levantado el ánimo del votante socialista porque, pasado ya el tiempo, se le reconocía todavía como el buen presidente que había sido.
Es humanamente comprensible querer pasar a la historia con el reconocimiento que uno cree merecer. Nada hay de censurable en el hecho de reivindicarse, directamente o a través de terceros. Y así fue como, asentada como verdad que la participación en la campaña de Zapatero fue imprescindible para que Sánchez repitiese como presidente, tocaba en justo pago, ensalzar el legado sobre sus mandatos. El trabajo estaba hecho: Zapatero había sido injustamente tratado, pero el tiempo pone a todos en su sitio. Y él por fin ocupaba el suyo en el podio. Fue con él que España debutó en la modernidad. Con él empezó todo. Rehabilitación completa.
Solo que el tiempo, ese que pone a cada uno en su sitio, tiene la mala costumbre de no parar nunca. Los días han seguido cayendo uno tras otro, dando una oportunidad tras otra de emborronar cualquier biografía. Y es así que quizás Zapatero vuelve a estar en su sitio. En el de la palabrería hueca que no soporta el peso de la prueba. Tanta bondad, tantos derechos humanos, tanta transformación social al lado de los que sufren, tanto prestigio internacional acumulado como lobista de la paz para acabar escondiéndose ante el fraude de las elecciones venezolanas de las que él, en tanto que destacado miembro del Grupo de Puebla, es uno de los observadores internacionales.
En catalán hay una frase para explicar los silencios aparentemente inexplicables: cuando tienes el culo alquilado no te sientas cuando quieres. Quizás el expresidente solo está en una cárcel emocional de la que le resulta imposible escapar después de tantos viajes y tantas amistades forjadas en Venezuela. O quizás su empanada política obedece a otras circunstancias. O puede que, en la hipótesis más bondadosa, su silencio pretenda explicarse por las bondades que tendrá en el futuro su hipotético trabajo bajo el radar en la búsqueda de una solución democrática para Venezuela.
Pero esto último, aunque fuese lo cierto, es en las circunstancias actuales un error grave de apreciación. Si Zapatero viaja por el mundo, si su negocio como lobista funciona, si el prestigio lo avala como hombre al que llamar y pagar minutas, es porque tiene la tarjeta de expresidente del gobierno español. Su silencio compromete a terceros y sigue siendo, aunque él no lo vea así, institucional, no privado. En su mutis por el foro, hasta que o se demuestre lo contrario, está el aval de un expresidente de España a la dictadura de Maduro y a la conculcación de los derechos más básicos del pueblo venezolano.
Con su rehabilitación como expresidente, la agenda de Zapatero se llenó de actos, presentaciones y charlas. Parecía el hombre del momento. Asistí a dos de ellas en Barcelona. Discursos repletos de optimismo, de buenas palabras, de derechos humanos, de un mundo mejor en el que los malos son finalmente derrotados y el bien, gracias a la acción política de personas como él, acaba triunfando definitivamente en España y en el planeta entero.
Todas esas palabras, con el blanqueamiento por incomparecencia ante la estafa democrática de Nicolás Maduro, se derrumban como un castillo de naipes. Una bondad de parte no es bondad, es otra cosa. Ojalá podamos retractarnos en el futuro con otro artículo en el que debamos reconocer que su silencio tenía una explicación plausible que lo justificaba porque al final acabó beneficiando a los venezolanos.
Pero en el mientras tanto, el ejercicio de confianza que se nos pide es excesivo. Así que de momento nos limitaremos a apuntar que cada exmandatario escoge, gracias al privilegio de haber sido presidente de su país, cuál será su nuevo trabajo y a quienes escogerá como amigos. El excanciller alemán Gerhard Schröder escogió a Putin y el gas ruso. Zapatero al chavismo reencarnado en Nicolás Maduro.
( Josep Martí Blanch , EC 30.08.2024 )
Cuanta maldad..¿verdad?
…JA JAJA…que nervios.
Replica para Mr Mulligan.
Leña al ‘Perro’ hasta que suelte el poder
Las embestidas de la derecha no han conseguido erosionar la fe de los socialistas en su jefe de filas.
El Comité Federal de ayer fue eso:
una exhibición de fe
ANTONIO AVENDAÑO
08/09/2024 – 09:00
El presidente del Gobierno viaja a China haciendo creer a todos que lo hace con una agenda fundamentalmente comercial, pero el PP, atento siempre a la jugada, no se deja engañar. La secretaria general del Partido, Cuca Gamarra, desvelaba ayer la clave oculta de ese viaje: “Algunos pueden pensar que Sánchez se va China a aprender del Partido Comunista sobre disciplina interna, pero yo tengo la sensación de que Sánchez se va a China para que el Partido Comunista aprenda de él”. Hasta tal punto está el partido de Alberto Núñez Feijóo instalado en la desmesura, el chascarrillo y la hipérbole que ni siquiera les importa caer en el ridículo: todo vale con tal de desacreditar a ‘Perro’ Sánchez, siguiendo la tradición castiza que prescribe ‘leña al mono hasta que hable inglés’. Así pues, leña al ‘Perro’ hasta que suelte el poder.
La triple sobreactuación política, mediática y judicial de las derechas con motivo de los indultos primero y de la amnistía después se repite ahora con la financiación singular de Cataluña. La consigna ¡Que viene el lobo, que viene el lobo! no acaba, sin embargo, de dar los frutos deseados. El lobo de la quiebra de España por las cesiones al independentismo catalán solo enseña sus fauces en la retórica conservadora, en los discursos, los titulares y las columnas, pero no en la realidad; se trata de un lobo de la misma camada que otros igualmente ladradores pero poco mordedores que hemos conocido en el pasado: entre los más célebres y aulladores se recuerda aquel que llevaba grabado a fuego en su lomo pardo la consigna ‘Vender Navarra’, cansino augurio de tres lustros atrás del que nunca más volvió a saberse.
¡Torero, torero!
El último lobo azuzado por la derecha contra Sánchez era el de la rebelión interna que iba a producirse en el Partido Socialista a cuenta de la financiación catalana acordada con ERC para hacer presidente de la Generalitat a Salvador Illa. Recién inaugurado el curso político, el primer gran escenario de la revuelta iba a ser el Comité Federal del PSOE celebrado ayer, pero lo cierto es que nada sucedió en él. O sí, quizá sí: más que los apuros de Sánchez, lo que el cónclave evidenció fue la soledad de sus críticos. El castellano-manchego Emiliano García Page y el aragonés Javier Lambán dijeron lo que tenían que decir, que no era poco, y… no pasó nada. Más bien todo lo contrario: poco faltó para que Sánchez abandonara la plaza entre vítores de ¡torero, torero!, y no porque desplegara una contundente y bien armada batería de argumentos para convencer al Comité Federal de que lo acordado con Esquera no es un cupo ni un concierto: le bastó con ponerse a sí mismo como garantía de que la financiación singular de Cataluña es un paso más hacia una España más avanzada, solidaria y federal.
Las embestidas políticas, mediáticas y judiciales de la derecha no han conseguido erosionar la fe de los socialistas en su jefe de filas. El Comité Federal de ayer fue eso: una exhibición de fe. Se suponía que la financiación singular de Cataluña iba a ser la estrella de los debates, pero su brillo fue tan pálido que casi pasó desapercibida. Page y Lambán tal vez confiaban en un debate donde ellos por una parte y Sánchez por otra expusieran sus razones a favor y en contra del acuerdo alcanzado con ERC, pero Sánchez no se avino a lidiar ese torete: prácticamente no dijo ni una palabra sobre el contenido de ese pacto que tanto preocupa al PSOE más jacobino, pero no solo a él. En realidad, el presidente no solo no se arredró, sino que incluso se puso estupendo al declararse dispuesto a agotar la legislatura “con o sin el concurso del Poder Legislativo”.
Una pregunta sin formular
Muchos socialistas no están, ciertamente, del todo seguros de que el jefe no esté sobrepasando determinadas líneas rojas de las que el partido siempre se mantuvo prudentemente alejado, e incluso de que no esté adentrándose en territorios constitucionalmente inexplorados, si no minados, pero siguen confiando ciegamente en él: en su audacia, en su determinación, en su descaro, en su fortaleza, en su buena suerte. ¿Que la derecha dice que es un ‘Perro’? Vale, que lo diga. En todo caso, es nuestro ‘Perro’ y estamos seguros de que no va a soltar el hueso del poder solo porque así se lo demanden sus desesperados adversarios.
Y es que en el Comité Federal de ayer Sánchez no hizo política sino teología. Su intervención bien podría resumirse con estas tres palabras: “Creed en mí”. Y los socialistas creyeron. Siguen creyendo, aunque en a no pocos de ellos les gustaría, por supuesto en privado, preguntarle respetuosamente a su líder aquello que preguntaba cierto personaje de ‘La importancia de llamarse Ernesto’: “Lady Bracknell, me molesta mucho parecer curioso, pero ¿tendría usted la bondad de decirme quién soy?”.
…
¡¡¡Aleluya!!
¡Viva Ziluminatius!
…JA JAJA…que nervios.
Qué artículo de Avendaño pagado por Moncloa nos trae de nuevo, en el que prima un hecho que no le escandaliza : Sánchez no sabe lo que ha firmado ! , es incapaz de explicarlo , como ¿ se acuerdan ? Yolanda la de los fijos discontinuos .