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Me refiero a Rafael Nadal, que ayer la volvió a alcanzar ganando Roland Garros – uno de los cuatro grandes – por 14ª vez, lo que no tiene precedentes y difícilmente será superado, más aún que sus 22 victorias de Gran Slam, que sí podría ser igualado o superado por uno de sus dos máximos competidores de los últimos años. Pero tampoco cabe descartar que el bueno de Rafa siga sumando así que ya veremos.

En todo caso, Nadal es sin duda ya uno de los mejores deportistas de la Historia y ciertamente el mejor español. Son muchos los deportistas de élite que ganan, que ganan mucho y que lo hacen de forma sostenida en el tiempo, pero muy escasos los que son capaces de ganar tanto durante tanto tiempo. Porque además del talento, el esfuerzo y algo de suerte, hace falta una fortaleza mental y perseverancia sin límite que está al alcance de muy pocos. Esa y no otra es su principal virtud. No es tan alto, ni tan fuerte, ni saca tan bien, ni volea como los mejores. Es bueno, muy bueno en todas esas lides, pero la que le distingue es sin duda su capacidad de aguante, de correr a por totas las bolas como si fuera la última y de seguir luchando sin desfallecer cuando las cosas pintan mal.

Como gana tanto parece fácil pero no lo es ni mucho menos y con frecuencia las pasa canutas – como es lógico – en algún momento del torneo antes de poder superar las dificultades y ganar, como suele hacer.

Y encima es un tipo cabal, muy cabal, que mantiene los pies en el suelo y la cabeza muy bien amueblada pese a los millones que gana y los halagos continuos que recibe. Como los mejores, en todos los órdenes de la vida, porque no es cierto que para ser excepcional, de primera categoría, haya que ser un arrogante o directamente una mala persona, como se justifica muchas veces las chulerías y desplantes de otros fenómenos que parecen creerse que son seres superiores.

Rafa Nadal es un verdadero rol model de los que en España no andamos tan sobrados y es un orgullo que sea nuestro, producto en parte de nuestros hábitos y cultura, que tantos lados buenos tienen.

Nadal se hace mayor y tiene el cuerpo muy castigado así que pese a que los resultados acompañan, nos queda poco tiempo para seguir disfrutándolo. Y nos costará mucho tener otro igual o parecido pese a las muchas satisfacciones deportivas que produce nuestro país ya sea en futbol, baloncesto, golf, balonmano, waterpolo, golf, fórmula 1, motos, etc.

No sé muy bien cuál sería la mejor manera para aprovecharlo una vez se retire pero habría que encontrarla, tanto por lo mucho que se merece un papel prominente en representación de nuestro país como por los réditos que nos supondría.

En todo caso, muchas gracias Nadal por habernos hecho disfrutar tanto, una vez más, y la mejor de las suertes para el futuro.

Posdata: Cfr infra en caso de desconocer qué es Roland Garros