La nueva normalidad vasca

Carlos Hidalgo

A quienes ya tenemos una edad se nos sigue haciendo raro ver unas elecciones vascas que no estén sujetas a la tensión del terrorismo. Hace casi 23 años que la banda terrorista reconoció su derrota disfrazada de “cese definitivo” y desde entonces parece a veces que no hubieran existido nunca. Ojalá.

Hay cosas que parecen que no han cambiado, como que el PNV siga en la lehendakaritza, pero otras nos parecen increíbles, como que Bildu, esa mezcla de la izquierda nacionalista que se oponía a ETA y los restos de Batasuna, la que fuera la rama política de los terroristas, esté a un paso de arrebatar el palacio de Ajuria Enea a los jeltzales. Una posibilidad que tiene doble lectura: por un lado, es el triunfo de la democracia española frente a la sinrazón de los etarras. Se les dijo que se podía participar en política sin armas y ahí está la prueba de que así era y ha sido. Por otro, da cierta rabia verlos subir en las encuestas cuando aún tienen en sus filas a personajes francamente despreciables. Pero el caso es que la violencia fracasó, los etarras siguen cumpliendo sus penas y el País Vasco cada vez se parece menos a ese micromundo opresivo que fue mientras existió ETA.

Da un poco de rabia también que el PNV siga siendo esa especie de PRI vasco, del que se da por hecho que ocupe las instituciones y que los partidos que más sacrificio y más vidas han puesto para que el terrorismo cesara, como PP y PSE, estén en mínimos históricos. No olvidemos que ETA se rindió con el PSOE gobernando en Ajuria Enea y en La Moncloa. Y con el apoyo fundamental del PP en el parlamento vasco. Y tras este triunfo de repente parecieron perder fuelle hasta hoy, donde el PSOE se ve como bisagra entre PNV y Bildu y el PP vasco apenas tiene relevancia.

Lejos parece quedar ya ese PSOE hecho de profesionales vascos sin miedo y de sindicalistas más duros que los que les amenazaban. Y ahora parece un mero acompañante del PNV, con el que gobierna en coalición. Ahora es un partido más pequeño, más profesional y más necesitado de un relevo generacional a todos los niveles. Los años de ser un duro partido de trinchera le han quitado un aire y unos cuadros que ahora le hacen muchísima falta. Y lo mismo se podría decir del PP vasco, que además se ha labrado una inmerecida fama de partido antipático, más por culpa de sus cuadros genoveses que de los vascos. Sin ser, en el fondo, un partido muy diferente al PNV.

El caso es que es posible que la izquierda nacionalista vasca gane por primera vez unas elecciones y pueda conseguir gobernar. Y también es posible que necesite el apoyo del PSOE para lograrlo, lo que nos aboca a unas cuantas semanas de dramas y escándalos por parte de los medios más afines al PP, como del propio PP, que además necesita titulares que no sean nuevos chanchullos cercanos a una presidenta que ni gobierna, ni lo permite.

 

2 comentarios en “La nueva normalidad vasca

  1. Tremendo dilema para el PSE: pactar con el que gane le provocará problemas con el otro, sobre todo si es el PNV, en Madrid.

  2. No es ningún dilema . Directamente al basurero de la historia . Si el PSOE señala como su candidato en Galicia al BNG ¿ para qué perder el tiempo con un personaje de cuarta fila como Besteiro ? Pues allí tiene la respuesta .

    En Euskadi lo tiene merecido el PNV ( Dios y ley vieja ) por dar de comer a la bicha , por haberla blanqueado , por sus políticas incómodas y divisivas ; si son tan buenos como dice junto a Moncloa , gente atolondrada votará al original sin filtros ; si entroniza a Bildu en Navarra pues aquí también le votamos , oye .
    que no nos quedamos chiquitos , ¡ aivalahostia !

    El lema del PNV para esta campaña es Indar Berria ( Fuerza Nueva ) pero como ya no se estudia Historia , total qué más da .

    Y no solo es posible como señala el articulista sino absolutamente necesaria la colaboración socialista ( en su descenso a los infiernos ) para poder gobernar y así iniciar una etapa de decadencia moral y material para nuestro micropaís , con la extensión desvastadora en el resto de España empezando por la desaparición definitiva del PSOE .
    No estoy de acuerdo por ser radicalmente falsa su nota de que Ayuso no gobierna ( lo hace y con una mayoría muy robusta ) y radicalmente verdadera la de que no permite dejar el gobierno en manos de gente tan incompetente como la tercera fuerza de un mindundi acomplejado ,obediente y sin ideas .

    El problema del PSOE se llama Sánchez del cual desconfía profundamente el PNV lo que no deja de ser una buena noticia .

    Si queda Bildu con un diputado por delante del PNV , los vascos , Moncloa y el PSOE tendremos un problema muy serio , y por este orden .

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