Putin no levanta cabeza: Eurovisión

LBNL

Le caen en todos los frentes, empezando por el de batalla donde las tropas ucranianas no solo resisten, a duras penas, sino que consiguen incluso recuperar territorio: véase Kharkiv y alrededores, de los que las tropas rusas se retiran. Y siguiendo por el político, con Finlandia y Suecia decidiendo su adhesión a la OTAN tras décadas de neutralidad, medio fingida tras la anexión de Crimea en 2014 y abandonada tras la agresión a Ucrania. Por no hablar del aislamiento popular: véase la votación popular en Eurovisión. Putin dirá que todo es un complot de la CIA y que Occidente es anti rusa y bla bla bla. Y que los países que representan la mitad de la población mundial (los BRICS – China, India, Sudáfrica y Brasil – además de Nigeria y otros) no votan en contra de Rusia en los foros internacionales. Pero tampoco a favor, como mucho se abstienen. Y no cuentan allí donde a Rusia le interesa. Porque Putin la gozaba asistiendo a las Cumbres del G-8 a las que ya no puede acudir desde 2014. Y disfrutaba teniendo un gran premio de fórmula uno, y participando en la Champions o en Eurovisión. Y no solo no se le ajunta sino que Europa entera vota para aupar a Ucrania, el país que nunca ha existido según su visión, a lo más alto.

Yo me trago Eurovisión todos los años, especialmente las votaciones. No sigo las fases previas ni las semi finales y aborrezco bastante a la mayoría de los concursantes. Pero las votaciones de los jurados nacionales – tan previsibles las más de las veces y tan sorprendentes en otras – y sobre todo las del público europeo, no me las pierdo. Cito de memoria pero las tres repúblicas bálticas le dieron los 12 puntos a Ucrania, según lo previsto. Pero Bulgaria sorprendentemente no le dio siquiera un punto – como tampoco demasiados otros países ex Pacto de Varsovia – y Croacia le dio los 12 a Serbia, canción que a mí me pareció un bodrio pero que luego se llevó un mogollón de puntos de la misma audiencia manipulada por la CIA que se volcó con Ucrania. Seguramente porque la canción – si es que puede calificarse así – serbia parecía ser una protesta contra el lamentable estado de la sanidad pública en la Serbia de Vucic, sempiterno aliado de Putin. Sigue leyendo