LBNL
Se acabó, el tan anunciado cambio de ciclo ya está aquí. Ha sido un ciclo glorioso, en resultados, dominación y en belleza, una combinación de buen estilo, estética y efectividad a un nivel posiblemente nunca antes visto – al menos durante tantos años seguidos – a decir de los buenos conocedores y comentaristas menos forofos, o más objetivos, que viene a ser lo mismo. Pero todo lo bueno se acaba y el ciclo terminó el miércoles por la noche, con la derrota en la final de Copa. No es la primera derrota y el ciclo venía declinando desde hace tiempo pero por la forma en que se produjo, los acontecimientos que la han precedido en los últimos meses y las perspectivas que se adivinan, es evidente que el ciclo ha terminado.