El primer otoño

Juanjo Cáceres

Es sabido que este mes de septiembre se ha iniciado un curso político que marcará el devenir del Gobierno de España, pues desde el mismo se convocarán unas elecciones municipales y autonómicas y quizás, de producirse un adelanto, también unas elecciones generales. Obtener el privilegio de gobernar el país durante los próximos años es el objetivo de una guerra preelectoral que ya ha comenzado y que hasta el momento se disputa en los estudios demoscópicos, en el hemiciclo del Congreso y del Senado y en los medios de comunicación, pero que con el paso de los meses se trasladará cada vez más a los territorios peninsulares.

El pasado mes de agosto, el Gobierno actual dejó los deberes hechos para acabar de sacar adelante las medidas estrellas del próximo otoño que todos conocemos. La cuestión es si le premiarán electoralmente o si las circunstancias actuales le llevan por un camino donde el cambio de gobierno es prácticamente inevitable. Solo el tiempo lo dirá. Es cierto que nada ocurre por estar escrito, que hasta a los peores escenarios se les puede dar un giro y que desde luego puede haber y habrán un sinfín de situaciones imprevistas o no tan imprevistas, cuyo impacto está por determinar. Sigue leyendo