Ejecutivos y maestros: el otro efecto del 11-S

Ricardo Parellada

En los últimos años ha aumentado de forma espectacular en los Estados Unidos el número de altos ejecutivos que han decidido dejar los negocios por la docencia. Como cuenta la periodista Meredith May en sus reportajes del San Francisco Cronicle, a los centros de formación de profesores de todo el país acuden multitud de hombres y mujeres de negocios decididos a dar un giro radical a sus vidas.

La asociación Teach for America, que ofrece la oportunidad de cambiar el teléfono, las reuniones, los vuelos, las negociaciones y los contratos por la tiza en escuelas de barrio, experimentó el año 2002 un aumento de solicitudes del 180 por ciento, inusitado en sus doce años anteriores de existencia.

El fenómeno es nacional, pero es especialmente acusado en el Silicon Valley californiano, que ejerce una vez más el liderazgo moral de la nación, pues sus damas y caballeros más selectos están dejando la dirección y el glamour de las empresas punto-com para nutrir de nueva sangre y nuevo espíritu a las escuelas del Estado de Oro.

Según cuenta Meredith May, Garlin Cephas era un brillante ejecutivo de una empresa de ordenadores hasta que tuvo que someterse a una operación de vida o muerte por un cáncer de colon. La operación tuvo éxito y un momento de reflexión sobre este regalo de la vida lo llevó a una de las escuelas más conflictivas del estado: Castlemont High de Oakland.

Sigue leyendo